El asesinato de Fernando Báez Sosa en manos de un grupo de rugbiers conmocionó al país pero lo cierto es que está lejos de ser un caso aislado. Los ataques y agresiones en manada son escenas que se ven cada vez más seguido. 

En las últimas horas se difundió un nuevo caso -ocurrió dos días antes de la muerte de Fernando, también a la salida de un boliche en Villa Gesell- cuya víctima es Mateo Romby, estudiante de Medicina de 18 años, oriundo de la localidad mendocina de General Alvear.

El joven recibió una brutal golpiza y los propios agresores filmaron, difundieron y hasta se burlaron de "su presa" en las redes sociales. El mismo modus operandi con el que terminaron con la vida de Fernando Báez Sosa el sábado por la madrugada. También rugbiers.

"Él fue a bailar a un boliche y cuando sale, solo, porque se iba a juntar con amigas en la playa había un grupo de 8 personas que lo empiezan a hostigar a Mateo, él se para y ahí lo atacan. No eran tres como se ven en el video, eran 7 u 8", cuenta el padre, Walter, en diálogo con el canal TN. "No fue una pelea, fue un ataque lleno de odio, porque él estaba solo", reflexiona. 

"Sabemos quienes son porque ellos cuando subieron el video se etiquetaron", cuenta Walter. Tadeo Abraham fue quien publicó la salvaje agresión en su cuenta de Instrgram y reveló los nombres de los amigos quienes rápidamente cerraron sus redes sociales tras la viralización de las imágenes. 

"Yo no sé si eran jugadores de rugby o no quienes le pegaron a mi hijo, pero por suerte mi hijo está bien, consternado pero bien. Y agradezco que no respondió a los golpes sino no sé cómo hubiera terminado", concluyó.