Un grupo de delincuentes habían asaltado un banco Santander Río de la zona de Ituzaingó y, tras un tiroteo, se dieron a la fuga en un vehículo robado. Luego, ese mismo vehículo apareció en el barrio porteño de Villa Lugano.

Un llamado del 911 alertó a la policía sobre la presencia de un auto modelo Citroen Picasso perfectamente estacionado en el barrio de Villa Lugano.

Cuando el operativo llegó al lugar, pudo descubrir un cadáver en el baúl del auto, el cuerpo de una persona de 45 años llamada "La Gueira".

El vehículo tenía roto el vidrio de la ventanilla del conductor, aunque no se sabe si se trató de una maniobra de la policía para poder abrirlo o si ya estaba roto desde antes.

La reconstrucción del hecho permite a los investigadores suponer que el grupo de tres delincuentes que se dieron a la fuga tras haber formado parte de un tiroteo con la policía, quedaron con uno de sus compañeros muy malherido, que terminó falleciendo, y dejaron el cadáver atrás para continuar con la fuga.