La Antártida remota puede sentirse como el lugar más aislado de la Tierra y en muchos sentidos es un paso hacia otro mundo. Sin embrargo, el continente helado está más estrechamente conectado con el resto del planeta de lo que parece.

Ahora, científicos descubrieron que el Polo Sur se está calentando a un ritmo casi tres veces más rápido que el promedio mundial y gran parte de ese calentamiento está relacionado con los ciclos climáticos que ocurren a miles de kilómetros de distancia en los trópicos.

Un estudio publicado ayer en la revista Nature Climate Change examinó las temperaturas del aire en la superficie del observatorio meteorológico más austral del mundo: la estación Amundsen-Scott.

Los hallazgos mostraron que las temperaturas allí aumentaron en aproximadamente un grado Fahrenheit (0,556 °C) cada década desde el comienzo de 1990, aproximadamente tres veces más rápido que el promedio global.

De acuerdo a los investigadores, la causa probable son los patrones climáticos cambiantes en los trópicos, particularmente las cálidas temperaturas océanicas del Pacífico que provocan una interacción diferente con la atmósfera y, como resultado, transportan más aire caliente al sur hacia la Antártida.

Esto, a su vez, pudo haberse visto influenciado por la fluctuación natural del clima. La oscilación antártica, también conocida como Modo Anular del Sur, ayuda a regular un cinturón de vientos del oeste que fluyen alrededor del continente antártico y puede hacer que estos vientos se fortalezcan o debiliten periódicamente. Según explican, cuando los vientos son más fuertes, ayudan a empujar ese aire cálido sobre la Antártida, calentando el Polo Sur. 

Esto sugiere que el calentamiento reciente podría, en teoría, haber ocurrido sin ninguna influencia del cambio climático causado por el hombre; aunque si es cierto que fortaleció las tendencias observadas en las últimas décadas.

Resulta evidente, entonces, la complejidad del clima antártico y de cuán fuertemente influenciado está por los ciclos climáticos en regiones completamente diferentes del mundo.