La Selección Argentina de básquet sufrió su segunda derrota consecutiva en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 luego de caer por 81-71 ante España, su verdugo en la final del Mundial de China 2019, y complicó su clasificación a los cuartos de final.

A diferencia del debut frente a Eslovenia (que fue con una abultada derrota por 118-100), el elenco nacional tuvo un buen comienzo y llegó a estar 12-3 arriba en el marcador.

Sin embargo, con el correr de los minutos, no pudo sostener la diferencia frente a un conjunto español que comenzó a desplgar su jerarquía y demostrar por qué es el vigente campeón del mundo.

Antes de ir al descanso, los europeos tomaron la delantera y ya en la segunda mitad dominaron las riendas del juego de la mano de un Ricky Rubio (anotó 26 puntos) que cada vez que tomaba la posesión complicaba el juego argentino.

Esa tendencia a favor de España se mantuvo hasta el final y el seleccionado nacional no pudo encontrar los caminos para quebrar al rival y dar vuelta la historia.

El próximo domingo 1° de agosto, desde las 01.40 de nuestro país, Argentina jugará ante Japón en busca de la chance de clasificarse para la siguiente ronda como uno de los dos mejores terceros.

La queja de Luis Scola

Tras la derrota, el capitán argentino se quedó de algunos "malos hábitos" del equipo. "Me preocupan algunos malos hábitos, como protestar demasiado, de simular mucho o por esas protestas no bajar a defender. No tenemos tanto talento para darnos ese lujo. Lo hemos hecho muy bien siempre y ahora lo perdimos un poco", señaló Scola en diálogo con TyC Sports.

Y sentenció: "Hay una forma de ir por la cancha que no podemos perder".