Finalmente, Ángel Caberera tuvo un resultado negativo en el test de coronavirus (COVID-19) que se le realizó tras llegar a una clínica privada de Córdoba con síntomas compatibles con la enfermedad.
El "Pato" se dirigió por sus propios medios al centro de salud por presentar fiebre, dificultades para respirar y dolor de cabeza. Ante esta situación, fue sometido al hisopado correspondientes que arrojó un resultado negativo.
De todos modos, el golfista de 50 años permanece internado en una sala común y los médicos están investigando si se trata de un principio de neumonía, aunque indicaron que está "en muy buen estado de salud".
En los últimos tiempos, Cabrera estuvo alejado de la práctica profesional debido a lesiones y dolores en la espalda que le impedían mostrar su mejor nivel, con el que se consagró en el Abierto de los Estados Unidos en 2007 y en el Masters de Augusta en 2009.