Un chiquito argentino que se convirtió en un gigante. El mismo que tenía un problema de crecimiento en Rosario y se fue a Barcelona para ser el más grande, quizás, de todos los tiempos. Lionel Andrés Messi realizó su debut con la camiseta blaugrana el 16 de octubre de 2004 y el fútbol no advirtió que la historia cambiaría para siempre.

Ese día, un joven de 18 años a quien la camiseta 30 le quedaba enorme, comenzó a demostrar que podía poner el mundo a sus pies con su talento con la pelota. El chico ingresó por Deco a los 37 minutos del segundo tiempo en un clásico ante Espanyol.

El Barcelona era dirigido por el holandés Frank Rijkaard y el encuentro terminó 1 a 0 a favor de los culé pero, esa noche, el estadio de Cornellà-El Prat vio nacer futbolísticamente al único ganador -hasta ahora- de 5 Balones de Oro como mejor jugador del mundo.

En 2017 y en el aniversario del debut del crack, el club catalán homenajeó a Messi con un video que repasa sus inicios en La Masía, denota su crecimiento y su talento absoluto. 

Los elogios cada día son más grandes: después de la agónica clasificación de Argentina ante Ecuador con un hat-trick del 10, Javier Mascherano lo bautizó como "el dueño de este juego". 

Sus 30 títulos con la casaca blaugrana, 360 goles en 390 partidos en La Liga y los 96 goles en Champions League, entre otros datos, lo ponen dentro de los futbolistas más maravillosos de la historia. 

Sin dudas, Lionel Messi tiene potencial para seguir en lo más alto durante muchos años más. ¿Hasta cuándo seguirá sorprendiéndonos con su fútbol?¿Podrá conseguir un campeonato del mundo con la Selección Argentina? ¡Vamos, Leo!