Varios meses de lucha y de trabajo diferenciado permitieron que Fernando Gago pueda volver a estar a la par de sus compañeros en gran parte de la pretemporada, la cual le hacía falta ante las constantes lesiones de gravedad sufridas. Sin embargo, en el tramo final de la misma surgió una nueva dificultad que generó un profundo bajón anímico en el volante que analiza colgar los botines.

Ante esto, la preocupación del propio jugador genera un sentimiento similar en Guillermo Barros Schelotto y Daniel Angelici, que decidieron darle el tiempo necesario al ex Real Madrid para luego tener una charla formal para hablar de su futuro. A pocas horas de que la misma se concrete, decidió bajarse y resguardarse en su familia, lo que complica la situación.

Fernando Gago es y por el momento seguirá siendo el capitán del equipo. El plantel sabe de la importancia de él, pero la situación es crítica para determinar su futuro y lo quieren hacer sentir cómodo. El jugador parece no estarlo con sí mismo, que incluso decidió no participar de la cena íntima del club, en la que se celebrará el bicampeonato obtenido.

Las alarmas están encendidas, pero la decisión del jugador será la definitiva. Sin presiones, el entrenador y el presidente de Boca Juniors decidieron posponer su reunión en Casa Amarilla para la semana entrante, a pocos días de que se lleve adelante el cruce de ida por los octavos de final de la Copa Libertadores, ante Libertad.

El futuro de Gago es incierto. El miércoles será el debut del "xeneize" en la temporada (ante Alvarado de Mar del Plata por Copa Argentina) y se espera una palabra final y positiva de Fernando para volver a tener un lugar en el once inicial de Guillermo, en donde tiene su lugar reservado.