Las estrellas del fútbol están acostumbradas a gastar parte de su fortuna en aviones privados y disfrutar de lujos. Sin embargo, Sadio Mané rompió los esquemas.
Una de las figuras del Liverpool, flamante campeón de la Champions League, confesó que elige gastar dinero construyendo escuelas y ayudando a la gente que menos tiene.
"¿Para qué quiero 10 Ferrari, 20 relojes con diamantes y 2 aviones? ¿Qué haría eso por el mundo? Yo pasé hambre, trabajé en el campo, jugué al fútbol descalzo y no fui a la escuela. Hoy puedo ayudar a la gente. Prefiero construir escuelas y dar comida y ropa a la gente pobre", declaró en una entrevista con el medio nsemwoha.com.
Además, el futbolista recordó su difícil infancia en Senegal. "Tenía hambre y tenía que trabajar en el campo, Sobreviví tiempos difíciles, jugué fútbol descalzo, no tuve educación y muchas otras cosas, pero hoy con lo que gano gracias al fútbol, puedo ayudar a mi gente", reflexionó.