Con un elenco totalmente renovado, en tan solo algunos días llegará a Netflix, la tercera temporada de "The Crown", la exitosa serie relata los eventos más importantes de la realeza británica desde la asunción de Elizabeth II como la Reina de Inglaterra, en 1952.

En las dos primeras temporadas, la encargada de interpretar a la monarca para su versión joven fue Claire Foy, pero en esta tercera entrega prepara será la ganadora del Óscar, Olivia Colman, quien dará vida a una Elizabeth más madura.

El problema que se desató en torno a esta producción es que la mismísima Reina Elizabeth se enojó por la insinuación que se hace sobre una supuesta infidelidad de ella a su marido, Felipe de Edimburgo.

En la trama se sugiere que tuvo una aventura extramatrimonial con Lord Porchester, el gerente de la cuadra de caballos de su esposo. Se cuenta que ambos hicieron un viaje a Francia y Estados Unidos que, en principio, iba a ser de una semana, pero que se extendió a un mes. A la vuelta, su esposo comenzó a sospechar de una infidelidad por parte de su esposa, pero todo quedó reservado a su privacidad.

"Todo esto me parece de muy mal gusto y totalmente infundado. La reina es la última persona en el mundo que consideraría mirar a otro hombre que no fuese su marido", explicó DickiArbiter, ex jefe de prensa de la reina de Inglaterra, en una entrevista con el periódico británico, The Times.

Y agregó: "Esto solo es un cotilleo que ha estado por ahí rondando durante décadas, pero no tiene ningún fundamento. The Crown es una ficción. Nadie sabe las conversaciones privadas que tienen los miembros de la familia real, pero, claro, la gente siempre contará la historia que ellos quieran para hacerla más sensacionalista".