El 16 de febrero la policía de la provincia de San Luis encontró los restos del cuerpo de una mujer totalmente calcinados en un canal de desagüe ubicado en un descampado cercano al Camping S.E.T.I.A, ciudad de Villa Mercedes.

Este martes una prueba de ADN confirmó que el cuerpo - que estaba en una bolsa y enterrado - pertenece a María Fernanda Lucero, la mujer de 33 años, madre de dos hijos, que se encontraba desaparecida desde el 8 de enero.

La noticia fue confirmada por el fiscal de la causa, Maximiliano Bazla, quien en conferencia de prensa remarcó que la investigación continúa para determinar la causa y quien es el o los responsables del femicidio de Fernanda. 

"Aun no podemos precisar causa y el tiempo de su muerte, debido a que se han encontrado partes de su cuerpo en su mayoría calcinados, lo cual demora en poder tener una exactitud en este tema”, dijo el fiscal en diálogo con Télam.

A su vez, Bazla estimó que los restos llevaban de 40 a 45 días en ese lugar, casi el mismo tiempo que la mujer llevaba desaparecida. Por ese motivo se cree que habría sido asesinada a pocos días de denunciada su desaparición.

El principal acusado por su femicidio es José Luis Bramaglia, ex pareja de Lucero quien en una primera instancia intentó darse a la fuga. Sin embargo, la policía logró capturarlo 48 horas después en la zona de sierras de San Francisco del Monte de Oro.

Allí se había escapado con una mochila precaria, con algunos víveres. Al verse acorralado el hombre sacó un arma y se quitó la vida frente a los oficiales. Primero con un tiro en el abdomen y luego con otro en la cabeza.

En octubre del 2021 la mujer hacía denunciado a Bramaglia por violencia de género en un Juzgado de Paz de la provincia. La magistrada que intervino en esa oportunidad ordenó una perimetral. “Sin embargo, de a poco se fueron acercando los dos. Ella lo perdonó y volvieron a frecuentarse. Para fin de año estaban juntos de nuevo”, detallaron desde la Justicia.

Los familiares de la víctima recién hicieron la denuncia por pedido de paradero casi un mes después ya que durante ese tiempo alguien tomó su celular y, haciéndose pasar por ella, enviaba mensajes diciendo que estaba de vacaciones en Córdoba.

“Hola. Nos fuimos con José Luis de vacaciones a Córdoba. Estamos muy bien. Hace mucho que no era tan feliz”, decía uno de los mensajes que fue enviado desde el celular de María Fernanda a una de sus amigas el 10 de enero pasado.

Con el pasar de los días a sus allegados les resultaba extraño que cada vez que llamaban al celular atendía él: “Nos llamó mucho la atención desde el principio porque ella no manda nunca textos. Siempre envía audios. Por eso, nos sorprendió, pero también tengo que decir que nos contaba que estaba bien; entonces no hicimos mucho más", contó un familiar de Fernanda.

Según la información que consta en el expediente, la denuncia formal de la desaparición se radicó el 4 de febrero pasado. A partir de ahí comenzó la búsqueda de la mujer. Cuando la familia de Fernanda se presentó en la Comisaria de Villa Mercedes.