Mientras que el mundo estaba alerta a la 95º edición de los Premios Oscar, en España se llevaba a cabo la 26ª edición del Festival de Málaga, donde la actriz Blanca Portillo, recibió un reconocimiento por su carrera y sorprendió con un discurso que se hizo viral. 

"Os estaréis preguntando qué hace vestida así esta mamarracha en una noche de lujo y esplendor", comenzaba su discurso Portillo mientras se mostraba en jeans, remera básica y zapatillas. 

El discurso coincide en la misma noche en la que Lady Gaga se presentó en Los Oscar para cantar el tema de la película Top Gun: Maverick, "Hold my hand", y lo hizo en remera, zapatillas y jeans rotos, para que solo resaltase su voz en la pantalla. 

Al tiempo que aseguró que su outfit fue "muy pensado" ya que iba a recibir un premio por su trayectoria y sobre "poner en valor el trabajo de casi 40 años dedicados casi de forma enfermiza a la interpretación", por  este motivo la actriz quiso recogerlo "como persona, no como actriz".

"Esto es sencilla y llanamente lo que soy, Blanca, una persona. Una mujer de 59 años que la mayor parte del tiempo tiene miedo y frío y que necesita desesperadamente cariño y apoyo; que prefiere los vaqueros a los trajes de noche, las cañas con los amigos al champán de las fiestas, que prefiere el amor a la admiración", aseguró ante la atenta mirada de la audiencia. 

Luego sumó el humor a su discurso y realizó una comparación con Brad Pitt:  "¿Qué? Tenemos algunas cosas en común", asentaba ante las risas de los presentes y puntualizar datos como la edad, sus similitudes físicas y la lástima de que no hubiese nacido en Burgos para poder haber vivido una historia de amor con él, la actriz terminaba hablando de uno de los grandes tabúes en la industria cinematográfica: la apariencia física".

"Ambos hemos tenido que luchar contra nuestro físico para que se valoraran nuestras capacidades actorales... solo que al revés", apelaba a la ironía para justificar su punto. "Él ha luchado contra su belleza para demostrar que es más que un cuerpo y un rostro hermosos y yo, contra mi falta de belleza para demostrar que sin ella también se puede ser actriz".

Ya para cerrar, Portillo quiso dejar un mensaje de de resiliencia y expresó: “Quiero aprovechar este reconocimiento para lanzar un mensaje de fuerza y de esperanza a todos y todas a quienes alguna vez les han dicho que les hace falta el físico para dedicarse a esta profesión. Para dedicarse a ella lo que hace falta es amor, esfuerzo, formación, capacidad de soñar lo que no existe, valentía para sobreponerse al miedo, respeto por ti mismo y quienes te rodean. Cultura, trabajo y devoción. Todo eso aumenta con los años y con la práctica. Todo lo demás, se lo lleva el tiempo”, cerró.