Como parte de la política del nuevo gobierno de "cero tolerancia" con piquetes y movilizaciones, la Policía de la Ciudad de Buenos Aires desalojó esta mañana al Tercer Malón de la Paz, instalado en Plaza Lavalle desde hace cuatro meses con el fin de conseguir una vuelta atrás en la reforma constitucional del gobierno jujeño.

Días de violencia y represión tuvieron lugar cuatro meses atrás, con la reforma constitucional impulsada por el gobernador Gerardo Morales en Jujuy, pese al rechazo de gran parte de la población. En un reclamo por la nulidad de la decisión, el Tercer Malón de la Paz instaló un campamento entonces en Plaza Lavalle, ante los ojos de la ciudad más poblada del país.

La asunción de Javier Milei generó un cambio radical en las políticas respecto a la tolerancia a los piquetes y movilizaciones, y esta mañana ocurrió el primer ejemplo con el desalojo. "En la Ciudad asumimos un compromiso con los vecinos: ordenar el espacio público para que puedan volver a disfrutarlo. No da lo mismo avasallar los derechos de otros que apostar a una convivencia respetuosa. Vamos a seguir por este camino del orden", declaró Jorge Macri en un mensaje de prensa difundido este sábado.

En esa línea, el gobernador indicó que su gestión "desalojó esta mañana pacíficamente la 'ranchada' ubicada en la Plaza Lavalle donde decenas de personas ocupaban ilegalmente el espacio público".

Pese a la acción simbólica de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, los integrantes del movimiento habían anunciado el viernes su plan de marcharse este sábado del lugar por una demora en los micros que los llevarían a Jujuy tras cuatro meses de protesta pacífica.