Tras haberse reunido con el Papa Francisco en el Vaticano, el presidente Javier Milei evaluó la audiencia y se mostró sensibilizado, ya que asegura haber tenido que reconsiderar algunas posiciones.

Durante su aparición en el programa Quarta Reppublica del canal de italiano Retequattro, señaló que el Sumo Pontífice "representa una institución muy importante sobre todo en un país como Argentina, que tiene tantas raíces católicas. En consecuencia, tuve que reconsiderar algunas posturas y, a partir de ese momento, comenzamos a construir un vínculo positivo". Esto lo llevó a recordar a cuando lo calificó de enemigo.

Luego, en otro pasaje de la nota, declaró que "filosóficamente soy anarcocapitalista y por lo tanto siento un profundo desprecio por el Estado. Creo que el Estado es el enemigo, creo que el Estado es una asociación criminal".

En ese sentido, continuó parafraseando a Oppenheimer: "El método que se utiliza en el mercado es la inversión, el comercio, y el método del Estado es precisamente el robo, y por lo tanto el Estado no es solo la mayor organización criminal del mundo, sino también el mayor ladrón estacionario del mundo".

Y ejemplificó que "un ladrón ataca de vez en cuando, pero cada vez que vas a comprar algo en un lugar, te está robando el Estado a través de los impuestos; por lo tanto, el Estado te roba todos los días".

Y, finalmente, al ser consultado por su gestión, sostuvo que "en estos 50 días ha sido iniciar y poner en marcha reformas estructurales. De estas reformas, 350 se consideraron urgentes y 650 se incluyeron en una ley, es decir, la ley de la libertad de los argentinos de base. Y eso es interesante, porque el eje central de todo esto es que se refiere a devolver el poder y la libertad a los argentinos".