La violencia vuelve a paralizar este martes Rosario, luego de que la UTA anunciara un paro de transporte tras al menos cuatro ataques ocurridos anoche en la ciudad. Horas después, los taxistas se plegaron a la medida de fuerza, aunque esta mañana habían retomado el servicio.

Los cuatro ataques ocurrieron anoche casi en simultáneo en distintos puntos de la ciudad y, se cree, en forma coordinada.

Por un lado, choferes de la línea 110 hallaron una nueva nota amenazante en una de las unidades. Apenas unas horas antes, durante la madrugada del lunes, otra nota había sido hallada en un coche de la línea 153, que paralizó el servicio hasta el mediodía de ayer.

En otro episodio, un interno del Expreso Interurbano dijo haber escuchado estruendos justo antes de que estallaran los vidrios de la unidad. El coche iba vacío, ya que se dirigía al punto de inicio del recorrido. Aún no se determinó si fue apedreado o si se trató de una balacera.

En en barrio Las Flores, en la zona sur de la ciudad, ocurrió un hecho similar y se intentaba determinar de qué eran los impactos sobre la carrocería.

Por último, una conductora de la línea 126 denunció haber escuchado tres disparos cuando circulaba por Crespo y Virasoro.

Ayer, en medio del paro que dispusieron los choferes tras la nota que hallaron en un coche de la línea 153, los trabajadores se reunieron con autoridades provinciales y municipales y acordaron retomar la actividad con la promesa de que se realicen controles aleatorios a los pasajeros del transporte y se refuerce la seguridad durante la noche y en los depósitos. También se evaluaba sumar corredores seguros en algunas zonas.