Este martes, el banco estadounidense JP Morgan estimó que Argentina recibiría una inyección de capital cercana a los 1.000 millones de dólares si el proveedor de índices MSCI decide mejorar su estatus a mercado emergente. De esta cifra, 786 millones provendrían del Índice Estándar y 176 millones del Índice de Pequeñas Capitalizaciones.

Actualmente, Argentina está clasificada como un mercado independiente, fuera del conjunto de índices de mercados emergentes de MSCI, tras ser degradada en noviembre de 2021 debido a problemas de accesibilidad al mercado, incluidos los estrictos controles de capital. Según JP Morgan, la mejora en la clasificación aliviaría algunas restricciones, especialmente si las condiciones macroeconómicas mejoran.

Mientras tanto, el gobierno argentino continúa intentando estabilizar la economía con reformas significativas en un contexto de alta inflación, recesión y múltiples controles de capital. A pesar de estas dificultades, la posibilidad de una reclasificación ha generado expectativas positivas en los activos argentinos.

En caso de que Argentina sea reclasificada como un mercado emergente, JP Morgan anticipa que cuatro empresas argentinas podrían ingresar al Índice Estándar de MSCI: YPF, Grupo Financiero Galicia, Banco Macro y Pampa Energía. Además, el Índice de Pequeñas Capitalizaciones de MSCI Argentina podría incluir hasta once componentes.

Diego Celedón, de JP Morgan, le afirmó a Reuters que "con un peso estimado de 0,2% en los EM, Argentina se situaría entre Colombia y Perú en el Índice EM". 

La clasificación de un país en los índices MSCI pueden influir significativamente en la inversión extranjera que recibe, ya que muchos fondos de inversión están limitados a invertir solo en países clasificados dentro de ciertos índices.