Javier Milei y Victoria Villarruel participaron de actos separados por el Día de la Bandera. El presidente encabezó una ceremonia en el Campo de Polo, en la Ciudad de Buenos Aires, mientras que la vice fue a Rosario para participar del izamiento de la bandera y la jura de más de ocho mil alumnos de diez provincias que realizarán la promesa a la bandera y dijo no haber sido invitada a la celebración oficial.

En la Capital Federal, el mandatario criticó a sus antecesores y denunció que "durante años, la política utilizó a las Fuerzas Armadas como un chivo expiatorio para justificar la reducción del gasto en defensa, bajo el argumento de que los uniformados eran los malos y los grandes culpables de la decadencia nacional".

Mientras tanto, desde Rosario, la titular del Senado se refirió con cierta ironía a su ausencia en Buenos Aires. "¿Qué mejor lugar para estar honrando al general Manuel Belgrano que estar acá en Rosario?", dijo ante las consultas de la prensa. Luego, sobre si había sido invitada a la ceremonia que encabezó el Presidente, dijo: "No fui invitada".

La conmemoración de un nuevo aniversario del fallecimiento de Belgrano volvió a exponer las diferencias -a este punto irreconciliables- entre las máximas autoridades del Poder Ejecutivo.

La última vez que Milei y Villarruel coincidieron en un acto oficial, fue el 25 de mayo pasado en el Tedeum en la Catedral Metropolitana de la Capital Federal. En aquella mañana, Milei ignoró a su vice y desairó al jefe de Gobierno Jorge Macri, negándole el saludo, en medio de las tensiones por la campaña para las legislativas porteñas. Ese mismo día, con un mensaje que pareció tener más de un destinatario, el Presidente escribió en sus redes: "Roma no paga traidores".