El gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, cruzó hoy al Gobierno nacional por el cierre de campaña que encabezará esta tarde el presidente Javier Milei en Moreno de cara a las elecciones legislativas bonaerenses de este domingo.

A través de un posteo en X, que tituló "Un freno al desborde", Kicillof acusó al Gobierno de recurrir al "caos y la violencia" como una "estrategia de comunicación". En ese sentido, señaló "llamativas fallas en la seguridad de la comitiva de funcionarios y presidencial, a cargo de Casa Militar y de las fuerzas federales".

"Lo vimos hace pocos días en Lomas de Zamora: una caravana obviamente organizada para provocar, con una sospechosa desprotección del propio presidente. De no haber actuado con responsabilidad la Policía Bonaerense, la situación habría sido mucho más caótica. Lo tuvo que reconocer la propia Ministra Bullrich (...) También vimos escenas similares en Junín y Corrientes, distritos en donde no gobierna el peronismo. Igual intentaron echarnos la culpa", planteó.

Con respecto al acto convocado para las 17 de este miércoles en el Club Atlético Villa Ángela del mencionado partido bonaerense, Kicillof planteó las sospechas que sobrevuelan la gobernación bonaerense.

"Con escasa anticipación, nos enteramos de que La Libertad Avanza decidió hacer su cierre de campaña en Moreno. Tienen todo el derecho a hacer campaña, pero esta convocatoria tiene aspectos muy extraños y sospechosos: en primer lugar, se elige un lugar que no está preparado para realizar un acto de estas características, en segundo lugar intervienen en su organización personajes con más prontuario delictivo que experiencia política, en tercer lugar, los dirigentes de LLA advierten sobre hechos de violencia que podrían producirse", advirtió el mandatario provincial.

Agregó a su vez que la convocatoria se da en medio del escándalo que desató la difusión de los audios de Karina Milei registrados en Casa Rosada y otras sedes del poder político y la posterior medida cautelar que prohibió su publicación en los medios de comunicación. 

Kicillof recalcó que la seguridad del Presidente "está a cargo de Casa Militar y las fuerzas federales". Y aunque aclaró que desde la Provincia desplegarán un gran operativo en la zona en línea con las indicaciones del comando unificado por Casa Militar, "no confiamos en este Gobierno. Un Gobierno que hizo negocios con los medicamentos de las personas con discapacidad es capaz de cualquier cosa. Capaz de buscar episodios de desorden para distraer". 

Por ello, llamó a los vecinos de Moreno a no concurrir al acto de cierre de campaña de La Libertad Avanza. "Hay miles de razones para querer expresarle enojo a un Presidente que no hizo nada por Moreno. Pero el verdadero modo de expresar ese enojo no es con gritos ni con piedras: es con votos el domingo", sostuvo. "Este domingo, con el voto, será posible y necesario ponerle un freno a la violencia, al autoritarismo y a la mentira. Hay que ponerle un límite a este desenfreno. Y es en las urnas".

"Y quiero advertirlo claramente: hago responsable a Milei de cualquier hecho de desorden o violencia que pueda producirse. Hace falta responsabilidad y apego a la democracia, dos cualidades que le faltan a este presidente", subrayó.

La Libertad Avanza cerrará esta tarde su campaña de cara a los comicios bonaerenses del domingo en medio de una seguidilla de escándalos que golpean la gestión nacional. Los audios de "El Jefe" -en los que no dice nada relacionado con actos de corrupción- se suman a las grabaciones de Diego Spagnuolo, el echado titular de la Agencia de Discapacidad (ANDIS) que en una serie de conversaciones privadas -se desconoce con quien- reveló una supuesta red de sobornos que, siempre según el relato del hombre que se identifica como el ex funcionario, alcanza a la secretaria general de la Presidencia y a los Menem, Eduardo y Martín, hombres clave de su mesa política.

"En estos días hemos visto la creciente desesperación del Gobierno Nacional. Un gobierno que perdió toda noción de límite, que se sostiene únicamente en su capacidad de mentir", dijo Kicillof.

En esa línea, sumó: "Con cada mentira que se descubre, aparecen nuevos curros y negociados que los dejan expuestos frente a una sociedad decidida a castigar democráticamente la estafa y el engaño. Y como no pueden explicar lo que hacen, como no quieren enfrentarse al juicio de las urnas, recurren a lo único que saben hacer: desviar la atención, sembrar caos, denunciar "fraude", enrarecer el clima social, causar desorden y agitar el odio".

"En lugar de reconocer la realidad, de aceptar el malestar social que ellos mismos causaron, el presidente y sus funcionarios eligen provocar más a la gente, lanzar irresponsables acusaciones de fraude y desplegar un rostro autoritario y violento como no veíamos en décadas. Ante las denuncias prefieren aplicar censura antes que dar explicaciones", añadió.