De buen humor y algo emocionado por su vuelta a Río Gallegos, ahora con el traje de precandidato presidencial por el PJ, Alberto Fernández dijo que este viaje "es una grata casualidad,algo que teníamos previsto desde hace dos semanas" con la gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner, y su vice, Pablo González.

"Para mí Santa Cruz no es cualquier provincia, es la tierra de Néstor, pero no fue programado, el destino quiso que sea así".

Con tono político, tras su encuentro la gobernadora, el ex jefe de Gabinete se negó a responder sobre sus críticas a la gestión de su compañera de fórmula, la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner y dijo: "ya hice muchas críticas y autocríticas".

"Es un momento en el que tenemos que trabajar juntos peronistas y no peronistas. Hemos tensado la cuerda innecesariamente y la verdad es que los resuntados son malos". 

Consultado sobre el armado del frente opositor, a semanas de la presentación de listas, Fernández sostuvo que habla con dirigentes de todos los sectores y pidió entender que "tenemos que estar de acuerdo en un mismo espacio. Si no nos ponemos de acuerdo, vayamos a una gran PASO y dejemos que la gente decida. Ojalá se avengan a encontrar esa salida, muchos son dirigentes muy valiosos y son bien recibidos".

En un breve diálogo con periodistas, Fernández advirtió sobre la situación económica del país al decir que "tenemos un gran problema con la deuda, pero vamos a ir poco a poco". 

Agregó que "hubo una política de mucho descuido a la Patagonia: cuando eliminaron los subsidios a los puertos, cuando cerraron la mina de Río Turbio y suspendieron durate años las obras de las represas. Lo increíble es que Alicia (Kirchner) recibió una provincia con muchas dificultades y se ha recuperado sin tomar deuda", destacó.