Luego de mostrarse cercano y saludar con un abrazo a Mauricio Macri durante la misa que se celebró este domingo en la Basílica de Luján, el presidente electo Alberto Fernández reafirmó la idea de respetarse más allá de las diferencias ideológicas.

"Fue una misa muy emotiva y muy linda. Es una aprendizaje para todos los argentinos, llegó la hora de estar juntos para siempre. Debemos respetarnos, el secreto es respetarnos, no pensar igual", enfatizó el mandatario que asumirá el próximo 10 de diciembre.

Además, resaltó que la Iglesia hizo "un enorme esfuerzo para unir a los argentinos".

Fernández concurrió a la misa, que duró poco más de una hora, acompañado por su pareja, Fabiola Yañez, al igual que Macri que asistió junto a su esposa Juliana Awada. La que no estuvo presente fue la vicepresidenta electa, Cristina Fernández de Kirchner.

Por parte del Frente de Todos, también asistieron los futuros ministros Daniel Arroyo (Desarrollo Social), Felipe Solá (Relaciones Exteriores), Santiago Cafiero (jefe de Gabinete), Marcela Losardo (Justicia y Derechos Humanos), Gabriel Katopodis (Obras Públicas) y Nicolás Trotta (Educación), entre otros.