El fiscal federal Federico Delgado imputó por presunto abuso sexual al senador nacional de la UCR, Juan Carlos Marino, denunciado la semana pasada por Claudia Guebel, una militante radical y empleada del Congreso de la Nación.

En el dictamen presentado ante el juez federal Ariel Lijo, el fiscal también imputó a un colaborador del senador, identificado como Pedro Fiorda, y a Juan Carlos Amarilla, este último presunto empleado parlamentario, todos acusados por Guebel.

La mujer celebró la decisión de la Fiscalía. "Estoy muy esperanzada de que al fin se haga justicia y de que este caso, más allá de mi persona, pueda contribuir a mejorar la situación laboral de todas las trabajadoras". Y aseguró que en el Congreso hubo otros casos de abuso.

"Recibí muchas llamadas de empleadas de la Cámara de Diputados llorando, que me dicen 'le tengo que ver la cara todos los días'", reveló. 

Delgado pidió como medidas de prueba citar a testigos, algunos de ellos asesores de Marino, e invitar al senador si quiere aportar su celular para analizar mensajes y llamados en función de que, en su denuncia, Guebel dijo haber recibido textos y videos con insinuaciones sexuales.

• QUÉ DECLARÓ LA MUJER EN SU DENUNCIA

"Los días 14 de cada mes me presentaba personalmente en el despacho del Senador para conseguir la firma del certificado de asistencia", relató Guebel en la fiscalía de Carlos Stornelli, donde ingresó el caso. "La primera vez que me presenté en el despacho de Marino, me hizo pasar a su oficina donde se encontraban varias asistentes que al notar mi presencia automáticamente salieron del despacho", agregó.

"Una vez que nos encontramos solos directamente me toco los pechos, y me preguntó cuándo íbamos a tomar un café, me dijo que aguardara su llamado que en cualquier momento nos veíamos. También me dijo que me manejara con su jefe de despacho, Pedro Fiorda, alias ´Cachi´".

Al mes siguiente, según consta en la denuncia, "concurrí al despacho del Senador, me atendió en esta oportunidad Pedro Fiorda. Me tomó de los dos brazos con fuerza, y me introdujo su lengua dentro de mi boca con violencia, yo intenté separarlo pero no lo logré. Luego me dijo 'Te voy a llamar a ver como seguimos'”.

"Sentí asco y mucho miedo por lo que había sucedido. Al día siguiente, caí en cama con un fuerte cuadro de stress, fiebre alta, ganglios inflamados y dolor en  todo el cuerpo".

Después de aquellos hechos descriptos, Guebel logró su pase a la Dirección General de Investigación y Capacitación del Senado de la Nación.