Una niña de 11 años estaba sola en su casa de la localidad bonaerense de Quilmes cuando ingresaron a robar tres "rompepuertas". La menor llamó al 911 y después le avisó a su mamá para que volviera a la casa.
El hecho ocurrió este miércoles en una casa de la calle Vélez Sarsfield al 100 de Quilmes Oeste, donde estaban la niña y su madre hasta que en horas del mediodía la mujer se retiró de la propiedad para ir a buscar a su hijo al colegio.
Apenas unos minutos después de que la mujer se fuera, la niña comenzó a escuchar fuertes golpes que provenían de la puerta de entrada y desde una ventana vio a tres sujetos que intentaban ingresar.
Sin dudar un segundo, tomó un celular, se escondió en su cuarto y llamó al 911. Le dijo al operador la dirección de su casa y que los tres delincuentes ya estaban adentro. Logró avisarle a su mamá, pero escondió el celular cuando escuchó que los delincuentes estaban cerca.
Uno de los delincuentes abrió la puerta, la vio y desde ese momento y sin dudar, cumplió las ordenes de los asaltantes.
Según declaró su madre en diálogo con TN, los delincuentes le dijeron a su hija que no tuviera miedo porque "los habían mandado" y no le iban a hacer daño. Ante esta aclaración, la pequeña preguntó quién los había mandado y los delincuentes le dijeron que la ex pareja de su madre.
La mujer, más tarde, confesó que está separada hace un año y medio y que mantienen conflictos judiciales con su ex pareja.
Los cinco móviles del Comando de Patrullas Quilmes Este no tardaron en llegar a la propiedad. Ante el arribo de las autoridades, los delincuentes salieron a la puerta y se entregaron.
Uno de los delincuentes es menor de edad, mientras que los dos restantes son mayores y con antecedentes penales por delitos de robo.
Interviene la Unidad Fiscal de Responsabilidad Penal Juvenil N° 2 de Quilmes, a cargo del fiscal Walter Bruno.