El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, enfatizó este viernes que serán "inflexibles" con los estudiantes que mantienen tomados al menos una decena de colegios de la Ciudad de Buenos Aires.

"Con las escuelas que volvieron a su actividad habitual retomamos el diálogo que siempre mantuvimos, pero con los que mantengan las tomas, vamos a ser inflexibles, no hay diálogo ante la extorsión, no vamos a permitir que pequeños grupos marquen el ritmo de la educación en la Ciudad", remarcó el alcalde.

Al encabezar la presentación de los avances en el Programa de Fluidez y Comprensión Lectora, Rodríguez Larreta dijo que "hay estudiantes apoyados por adultos irresponsables que le están sacando el derecho a estudiar a casi 5.000 alumnos" y dejó en claro que los padres tendrán que hacerse cargo "del daño que sus hijos están provocando".

Vale recordar en este punto que el Gobierno de la Ciudad denunció penalmente a los adultos y prepara una demanda millonaria para transferirles el costo correspondiente al pago de los sueldos a docentes y no docentes por cada día sin clases. En las últimas horas, efectivos de la Policía de la Ciudad se presentaron en los domicilios de las familias para notificarlos y la Secretaría de Derechos Humanos fue a la Justicia para que el Gobierno porteño retire a oficiales de la fuerza de la puerta de las escuelas ocupadas.

"Es un disparate", sostuvo la ministra de Educación, Soledad Acuña, al ser consultada por la presentación. Y aclaró que la Policía sólo cumplió con su rol de notificación y negó que haya consignas dispuestas en los colegios. Añadió, a su vez, que los efectivos que visitaron los domicilios de los estudiantes no fueron enviados por el Gobierno porteño.

"La educación es prioridad, mantuvimos las escuelas abiertas cuando en la Provincia estuvieron durante muchos meses cerradas, esa es la diferencia", apuntó Rodríguez Larreta al ser consultado por las declaraciones del gobernador bonaerense Axel Kicillof, que volvieron a tensar la relación entre ambas jurisdicciones.

Al menos 12 colegios continuaban hasta esta mañana tomados por sus alumnos, en reclamo de mejores viandas, mejoras en la infraestructura edilicia y contra las prácticas educativas obligatorias para estudiantes del último año del nivel secundario.