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Tu "basura", nuestra materia prima para crear

El consumo (y producción) responsable está creciendo a pasos agigantados y estas marcas y emprendimientos son el claro ejemplo de que, como dice el dicho, la basura de unos es el tesoro de otros.

Tu "basura", nuestra materia prima para crear

Tal vez creías que lo mejor que podías hacer por el medio ambiente era reciclar, pero hay acciones aún más útiles y que no consumen mucho tiempo. Algo clave a la hora de ayudar al planeta es tener en cuenta las tres R de la ecología: reducir, reutilizar y reciclar. Según datos aportados por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, en promedio cada argentino produce 1,15 kg de residuos sólidos al día, lo que al mes significa más de 34kg, y al año casi 408 kg. 408kg por persona por año. Eso es sin contar los desechos de empresas, servicios o industrias.

El reciclaje es una solución a medias porque necesita de recursos para completar el ciclo. Al reciclar reducimos mucho más que la basura que irá a un incinerador, o peor, que terminará en los océanos o bosques. Antes de reciclar se recomienda reducir el consumo y reutilizar al máximo los recursos. 

¿Sabías que la fabricación a partir de envases reciclados implica un ahorro energético de entre el 75% y 95%? Esto ocurre porque se reduce la cantidad de materia prima que necesitamos (y el gasto que implica su producción) y se ahorran recursos como electricidad y agua. 

Por todos esos motivos, es necesario que nos transformemos en consumidores responsables. Básicamente significa pensar antes de comprar. "Se trata de hacer más y mejor con menos", explican desde Consumers International y aclaran que no hay una única forma de hacerlo: "Puede ser la reconsideración de una compra y en su lugar reutilizar algo ya existente o elegir un producto con impacto beneficioso en el medio ambiente o a nivel social".

¿Te imaginás si pudiéramos “transformar” nuestros desechos en cosas útiles? Tapitas de bebidas convertidas en anteojos, neumáticos en zapatillas, pedazos de ropa vieja en gorras... Estos emprendedores buscaron una alternativa sustentable y lograron convertir esa “basura” en su materia prima.

Descartes textiles y silobolsas

Delfina Sciurano estaba por recibirse de diseñadora de indumentaria cuando notó lo "dañina y horrible" que era esa industria. Así que decidió hacer las cosas a su manera para poder sentirse cómoda trabajando de lo que le gustaba y nació Ékdysis: mochilas, bolsos, riñoneras y otros productos hechos de silobolsas.

"La silobolsa es un material de polietileno de alta densidad, que se utiliza en los campos para el almacenaje de granos. Se usa una vez durante el periodo de reserva y luego se desechan, se queman, se entierran y pocas veces se mandan a reciclar o se revenden. También reutilizamos descartes textiles de la industria textil, la segunda más contaminante del mundo. A partir de eso generamos la forrería de nuestros productos", detalló Delfina a Filo.news. 

Instagram @ekdysis.design
Instagram @ekdysis.design

FOH Hats en la marca de Felipe Hurtado. Él es el creador, diseñador, costurero y vendedor de este emprendimiento de gorras hechas con ropa que ya no se usa: "Empecé en 2013 desde el living de mi casa. Hice gorras pero no reutilizando telas. En 2018 dejé todo de lado y retomé en 2020 en Países Bajos". Al no encontrar trabajo, retomó su viejo proyecto de gorras: "Encontré en el rubro del upcycling una aceptación muy grande y un público joven que está interesadisimo. Todavía no hay muchas marcas y emprendedores que puedan solidificar esos ideales y esa necesidad. Me gusta pensar que estoy esforzándome y trabajando duro para que esa brecha se cierre cada vez más y más".

Tapas y paquetes de plástico

Materas, porta celulares y billeteras son algunos de los productos que hacen en Itupai con bolsas de un solo uso y sachets. "Usamos envases de polietileno, aquellos que están representados con el triángulo y un 2 o 4 en el centro. La ventaja es que se fusionan con las altas temperaturas. A través de la termofusión creamos una especia de tela plástica. Ese material es resistente, impermeable, tiene una larga vida útil y no necesita químicos, ni tintes para obtenerlo", contó Agustina Melendi.

En Itupai trabajan en conjunto con su comunidad para obtener su materia prima: "Usábamos nuestros propios descartes al principio. Actualmente levantamos envoltorios plásticos grandes que vemos por la calle, en las ferias les pedimos a nuestros seguidores que nos lleven sus residuos plásticos y hablamos con locales deportivos de nuestra zona para que nos den las bolsitas en las que llega la ropa que es descartada ni bien la ponen en exhibición".

En Necológica también trabajan con plásticos provenientes de residuos domésticos como las botellas de lavandina o envases de shampoo. Ingrid (licenciada en Gestión Ambiental) y Ezequiel (diseñador industrial) compran al taller protegido "Todo para ellos" de Necochea, los descartes a empresas y a otros municipios de esa zona. Con eso arman placas de plástico que son la base para sus productos: mesas ratonas, sillones, alacenas, bases para celulares y computadores, bancos, juegos de tejo, entre otros productos.

"Notamos que cuando las personas ven nuestros productos y entienden que están hechos a partir de residuos, les cae la ficha sobre la importancia de separar los residuos. Les cambia la percepción del residuo como basura y lo empiezan a ver como un recurso", contaron los fundadores en diálogo con Filo.news. Resaltaron que arrancaron en Necochea en mayo de 2019 como un espacio de concientización sobre cuestiones ambientales y que hoy se transformó en un proyecto más federal con una fusión entre el diseño y el cuidado del planeta.

Instagram @proyectomutan
Instagram @proyectomutan

Otra de las marcas que trabaja con este materal es Mutan: "Usamos tapitas de bebidas que gente de todo el país separa y dona a distintas fundaciones y cooperativas. Nosotros se las compramos a ellos", explicó Brochi Fasani, creador y coordinador del proyecto. En Mutan podés encontrar desde mobiliario como lámparas, mesas y macetas hasta anteojos de sol y de lectura, pasando por cestos y composteras.

"Desde el comienzo buscamos ser una propuesta de alta calidad industrial y sin ser más caros que los no reciclados, intentando ser una alternativa para cualquier persona que quisiera consumir de forma consciente. En los últimos años ha crecido la conciencia ambiental de los consumidores, sobre todo en la pandemia, y mucha más gente hoy en día composta en sus hogares y opta por productos reciclados", reconocieron desde Mutan.

En DosPuntos también compran tapitas de plásticos al Garrhan y además usan descartes industriales de bolsas y de la industria automotriz: "Desarrollamos y comercializamos diversos productos realizados con material reciclado como lámparas, cuadernos, cartucheras, bolsos, fundas para compu y tablets. Tenemos una línea propia, y hacemos desarrollos a pedido para empresas e instituciones", contó el socio, fundador y diseñador Dario Mercuri.

Instagram @dospuntosdi
Instagram @dospuntosdi

"Notamos buena aceptación cuando arrancamos, mucha gente se sorprendía por los materiales que usamos y la calidad que logramos con residuos que no tenían valor, y que convertimos en recursos. Hay cada vez más conciencia en las compras, y por lo tanto mayor conocimiento y deseo por productos que tengan triple impacto. Por parte de las empresas sucede lo mismo. Muchas buscan migrar sus regalos empresariales a productos sustentables. La educación del consumidor es clave para tener más criterios para elegir, por eso también buscamos que sea evidente en nuestros productos los descartes que usamos, para que lleven ese mensaje de que es posible transformar residuos en productos", cerró sobre este proyecto.

Neumáticos y descartes industriales

En Leaf se enfocan en la transformación de descartes industriales para crear ecobolsas, ecomochilas, ecocarteras y muchos ecoproductos más que resuelven necesidades de packaging y merchandasing de grandes empresas. "Hacemos productos que hacen la diferencia e invitan a ser protagonista del cambio. En la producción de nuestros productos generamos oportunidades laborales y de inclusión social para jóvenes con discapacidad intelectual que son parte del proceso de corte de moldería, mujeres en situación de vulnerabilidad que como costureras son el sustento económico de sus familias. También funcionamos como fuente de reinserción social para personas que fueron liberadas luego de haber cumplido su condena", explicaron.

Para sus productos usan materiales reciclados como caucho de neumático, banners publicitarios en desuso, big bags, silobolsas, velas náuticas, bolsas de malta, variados textiles y muchos más. "Obtenemos los materiales a través de convenios con las mismas empresas que las descartan. Permite a empresas a ser protagonistas del cambio comprando merchandasing, regalos empresariales o packaging hecho con materiales reciclados. Así multiplican el alcance del impacto social de la compra, aumentan su RSE, y por ende su imagen ante sus clientes".

"Con nuestra propuesta el descarte deja de ser un problema y pasa a servir tanto para resolver necesidades como para comunicar valores vinculados al cuidado del medio ambiente. El reciclado requiere un 70% menos de energía y emite un 59% menos de gases gases de invernadero, responsables en gran medida del cambio climático. Estamos convencidos de que el futuro pasa por la reutilización del residuo plástico en contraposición al actual uso de una sola vez", sostuvieron desde Leaf.

Desde Mutan quisieron aprovechar para hacer una agradecimiento para seguir motivando a aquellos que reciclan: "Los que separan plásticos en sus hogares son parte de nuestro proceso productivo. Nos gusta saber que nuestros productos pueden volver a los hogares de aquellos que comenzaron el proceso y ayudarlos a transformar sus descartes en forma de composteras o cambiar la forma que ven los plásticos con nuestros lentes".

Tengamos en claro que reciclar es la última opción y hay un montón de cosas que podemos hacer antes. Transformarnos en consumidores responsables es lo primero que debemos hacer. Una vez que tengamos esa mentalidad vamos a saber qué comprar, qué buscar y a quién comprarle. Como consumidores tenemos la responsabilidad de exigir a las grandes marcas y el conocimiento para optar por marcas que tengan un impacto positivo en el planeta y en nuestra sociedad. 

Gran parte de los entrevistados son parte de la industria de la indumentaria y todos quisieron remarcar en su testimonio a Filo.news que es la segunda industria más contaminante del mundo. Es la peor después del petróleo… Por eso es tan importante que como consumidores busquemos alternativas en este rubro. Rotemos la ropa entre amigos, compremos prendas de segunda mano, cuidemos lo que ya tenemos. Hay muchas opciones para evitar aportar a la moda rápida o fast fashion.