Gustavo y Susana se fueron de viaje por Semana Santa y dejaron la casa sola unos días. Vecinos denunciaron que el sábado una mujer rubia estuvo todo el día tocando el timbre de esta vivienda ubicada en la calle Sargento Cabral, entre Charlone y Chivilcoy para constatar que realmente estaba vacía.

Por la madrugada al menos tres delincuentes entraron a la vivienda y la desvalijaron. Se trató de un robo bien planeado. Dejaron sobre la mesa del patio las herramientas que utilzaron para forzar la reja y la puerta y tener acceso a la casa: "tijeras para cortar candados, un crique para levantar la reja de una ventana y una barreta de hierro para forzar puertas", resaltaron los damnificados. 

"Por todas las cosas que nos robaron, supongo que tuvieron que hacer, al menos, tres viajes", dijo el dueño de la casa.

Gustavo y Susana estaban en un campo, a varios kilómetros de distancia, cuando una vecina les advirtió de lo que sucedía la madrugada del domingo. Ellos llamaron a la Policía mientras regresaban a su hogar. 

Pero cuando llegaron se encontraron con un escenario aún más terrorífico: todos sus animales estaban muertos. 

"Estos delincuentes se ensañaron con los animales para poder concretar el asalto".

"Vinieron con veneno, sabiendo que teníamos los perros, pero al más chiquito lo mataron a palazos en la cabeza y el más grande, un Golden, murió intoxicado con ese veneno, al igual que los cuatro gatos. Estamos destrozados con todo esto que nos pasó y que se hayan ensañado con los animales, a los que queríamos como si fueran parte de la familia" dijo Gustavo. 

Por el caso todavía no hay detenidos ni sospechosos. Ningún vecino cuenta con cámara de seguridad que facilite la investigación e identificación de los delincuentes.