Las máscaras quirúrgicas no biodegradables y los guantes de látex utilizados en la lucha contra Covid-19 ya están contaminando la costa mediterránea en Francia, y el problema apenas comienza, advirtieron los grupos contra la contaminación.

La ONG francesa Opération mer propre (Operación mar limpio), había estado trabajando para limpiar el fondo del océano alrededor de Antibes en el sureste de Francia cuando se encontraron —como muestran en un video publicado en su Facebook— con un fuerte aumento de la contaminación por artículos médicos.

El fundador y activista de la asociación Laurent Lombard, quien publicó el video, escribió: "¿Te gustaría darte un chapuzón con Covid-19 este verano?". Y continúa: "Es responsabilidad de cada uno de nosotros evitar esta situación, pero también la de nuestros funcionarios electos, parlamentarios y servicios públicos. Podría ser el momento de unirnos para resolver esta nueva contaminación tan rápida y decisivamente como sea posible".

Las máscaras quirúrgicas pueden representar un riesgo ambiental considerable, ya que contienen material de polipropileno no biodegradable, y su descomposición puede demorar hasta 400 años. Sabiendo que se ordenaron más de 2 mil millones de máscaras durante la pandemia, "pronto habrá más máscaras que medusas en las aguas del Mediterráneo", advierte Lombard. A su vez, sostiene que esto es sólo el comienzo y que si nada cambia se va a convertir en un verdadero desastre ecológico que podría incluso ser un desastre sanitario.

La ONG dijo que a medida que Francia sale del cierre, el gobierno debería tomar medidas drásticas para garantizar que la basura relacionada con el coronavirus no se convierta en una nueva crisis.

Mientras tanto, un parlamentario en el distrito sureño de Alpes Marítimos, Eric Pauget, presentó un proyecto de ley para aumentar la multa por ensuciar un lugar público con máscaras, pasando a ser de € 300 en lugar de los actuales € 68.