Erika Lust hace cine porno: explícito, provocador, intenso, con una propuesta estética diversa y por sobre todas las cosas muy diferente a la pornografía mainstream. Lejos de caer en lugares “soft” las películas de Lust tienen una búsqueda política: reivindicar el placer de las mujeres y personas LGBTIQ+ representándolxs como seres sexualmente activos y autónomos.

Sin enfocarse solo en la penetración y el goce del hombre, sus producciones persiguen la importancia de representar al placer en sentido amplio y desafían la retórica tradicional sobre los roles de género.

Posporno, porno feminista, alternativo, da igual. Lo cierto es que hay otras formas de consumir pornografía y la visión de Lust, sin dudas, nos invita a ahondar en el universo de la sexualidad humana desde una perspectiva realista, inclusiva y original.

Es cierto que la pornografía tiene un fin bastante claro: excitar al espectador. Sin importar los diálogos o la trama, palo y a la bolsa. Pero Lust imaginó un cine que además de excitar cuente una historia y lo consiguió.

Nacida en Suecia y radicada en Barcelona, crea, produce y dirige películas pornográficas e independientes desde el año 2000. Su primer corto, “The Good Girl” (2004) tuvo 2 millones de descargas en dos semanas. Desde entonces, sus producciones pusieron patas para arriba al mundo de la pornografía. 

Es que Erika no solo demostró que se puede excitar al público sin recurrir a la penetración como único recurso y fin último de la trama sino que también echó luz a una industria estigmatizada, dominada por hombres cis y tildada de “poco prestigiosa”. Su cine lleva tiempo, presupuesto, dedicación y honestidad: los espectadores saben quién está haciendo las películas y cómo las hizo.

Lust es una entusiasta del porno. Su trabajo es una militancia por poner a la pornografía en un lugar positivo, de empoderamiento y educación. Sus historias se basan experiencias de sexo real y cotidiano que llevan a la pantalla la química, el juego de la seducción, el consentimiento y la comunicación en los encuentros sexuales.

Sin caer en exageraciones, Erika es hoy la mayor exponente del cine porno alternativo e independiente. Este año su plataforma desembarcó en Argentina y en esta nota charlamos con ella para explorar el fantástico mundo de calentarnos sin romper nada.

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¿Cómo fueron tus comienzos en la industria cinematográfica?

Al mudarme a Barcelona en el año 2000, me empecé a relacionar con bastantes amigxs que trabajaban en cine, así que entré en el sector haciendo las tareas más bajas de la producción. El cine siempre había sido una de mis pasiones, aunque no lo había estudiado. Y las primeras veces que ví pornografía me marcaron mucho, de una manera negativa.

En el 2004 rodé el cortometraje "The Good Girl". Lo subí a mi blog, ¡y en dos semanas tuvo 2 millones de descargas! En él uní a lo audiovisual mis reflexiones sobre género y sexualidad, y traté de hacer algo que pudiera ser una alternativa al porno estereotípico de los sitios gratuitos, que la mayoría de las veces es nocivo en lugar de sexy. Quería hacer una película que mostrara la importancia del placer femenino y no redujera el deseo masculino a un mero impulso para conquistar y poseer.

¿Por qué te interesaste en dicho género en particular?

Crear contenido que desafíe la retórica tradicional sobre los roles de género y la sexualidad es un catalizador vital para el cambio y creo que al hacer pornografía que represente con mayor cuidado la sexualidad humana es posible revertir muchas de las creencias prejuiciosas relacionadas con el placer femenino.

Al presentar a las mujeres como seres sexualmente autónomos, con deseos igualitarios a los de los hombres, promovemos la idea de que las mujeres merecen respeto tanto en la esfera sexual como en la sociedad. Al final las mujeres son seres sexuales con fantasías y deseos propios que pueden excitarse con sexo explícito en pantalla tanto como los hombres, por mucho que nuestra sexualidad se haya invisibilizado tanto o se haya representado al servicio del hombre de manera constante.

Me involucré en este género para subsanar una deficiencia que generalmente veo en el porno tradicional: no hay suficientes mujeres y personas LGBTQ+ y BIPOC detrás de la cámara aportando su propia perspectiva a las películas para conseguir que un público más amplio se identifique con ellas. Y yo quiero que todas estas personas puedan ocupar roles principales como productoras, directoras, guionistas, porque quiero que la pornografía cambie, y la verdad es que este cambio puede beneficiar a todo tipo de público, independientemente de su género u orientación sexual.

¿Qué significa la pornografía para vos?

Creo que la pornografía puede ser una herramienta realmente poderosa para ayudar las personas de cualquier género a explorar su sexualidad. Podemos crear pornografía donde las personas puedan verse a sí mismas en esas películas, para ver el sexo que tienen, para inspirarse, educarse y ser receptivas a la gran variedad de sexualidades diferentes que existen. La pornografía puede abrir tu mente sobre la sexualidad y ayudarte a descubrir nuevos deseos y fantasías. A muchos espectadores, el cine alternativo para adultos les ayuda a celebrar su sexualidad y les anima a empoderarse sexualmente de diversas formas.

¡Puede ayudarte a descubrir tu cuerpo, a aprender a dar placer a ti mismx y a lxs demás! Además de ser divertidas y saludables de ver, las películas explícitas pueden usarse como una herramienta para la liberación y educación sexual. También puede ser una herramienta para que la gente se deshaga de los tabúes. Todxs deberíamos ser capaces de ver el sexo como un universo amplio y hermoso de sensualidad y placer sin juicio.

La pornografía como medio se puede utilizar de forma positiva o negativa como todo lo demás. Creo que también es importante tener en cuenta que se supone que las películas eróticas no reemplazan el sexo o las relaciones humanas, sino que las condimentan.

¿Cuál es tu opinión sobre la industria pornográfica tradicional y cómo crees que tu arribo cambió la mirada?

La pornografía ha cambiado drásticamente desde los años 2000, así que la producción del 98% de la pornografía que se encuentra hoy en los sitios gratuitos es un campo tradicionalmente dominado por hombres cisgénero de mediana edad predominantemente blancos. Lo que yo hago es una propuesta alternativa y se necesita más.

La mayoría de las películas porno mainstream giran en torno a los deseos de los hombres, mientras que el papel de la mujer es, demasiadas veces, para complacer al hombre. Esto también refleja la creencia común de que a las mujeres no les interesa tanto el sexo como a los hombres.

Una de las ideas erróneas sobre el sexo más dañinas representadas en la típica película porno es que solo hay una forma correcta de tener relaciones sexuales y disfrutar del placer. ¡La sexualidad humana puede ser mucho más que eso! El sexo no es solo un acto mecánico centrado en los genitales. Creo que hay una gran falta de películas que retratan la seducción, la química, el juego genuino, el consentimiento mutuo y la comunicación en el sexo.

Mis películas promueven una actitud positiva hacia el sexo. Con mis películas quiero retratar relaciones sexuales sexy, divertidas y respetuosas, donde el consentimiento se muestra claramente y tanto mujeres como hombres y personas no-binarias son dueñas de su propio placer y están a cargo de lo que hacen con sus cuerpos, ya sea que la película sea romántica o kinky. Simulaciones de coerción, pedofilia o abuso están prohibidas.

Cuando pienso en sexo, no solo me refiero al acto, sino a toda la experiencia, desde la seducción hasta la intimidad. Quiero capturar la química entre los performers, sus cuerpos tocándose y la evolución de sus sensaciones. Estoy interesada en representar la complejidad de cada persona y en concentrar la narración en cómo se crea la pasión entre dos o más personas, qué es lo que les atrae de cada una, cuál es su historia previa...

¿Tuviste problemas a la hora de posicionar tus películas? ¿Cuáles fueron las reacciones de los directores, actores, consumidores de porno mainstream con tu llegada?

Mucha gente se rió de mí desde el principio, diciendo que mi idea era ridícula. Cuando intenté lanzar "The Good Girl" a las producciones de contenido para adultos, solían decirme que era genial pero que no había mercado para las mujeres... Las mujeres no están interesadas en comprar nada que tenga que ver con el sexo. "Les pagas a las mujeres por hacer porno, no haces películas para ellas". Eso me enojó, pero también me motivó a seguir siendo aún más determinada.

Aún hoy hay personas que no entienden qué hay detrás de mi trabajo y sigo enfrentando censura en las redes sociales. Por otro lado, también hay una comunidad cada vez mayor de personas que anhelan un cine para adultos más realista, inclusivo y original, que me apoyan a mí y a mi equipo para hacer siempre más y siempre mejor.

¿Crees que hay un prejuicio de parte del cine tradicional hacia el cine porno?

Desafortunadamente, la palabra "pornografía" está muy estigmatizada y tiene muchas connotaciones negativas. Cuando las personas escuchan la palabra "pornografía", instantáneamente piensan en las escenas a menudo extremas y violentas que están disponibles en abundancia en los sitios de porno gratuitos. Este tipo de pornografía se ha convertido en la norma y, en la mente de las personas, la pornografía ahora es automáticamente algo feo, violento, vergonzoso, y sin calidad cinematográfica.

Al usar los términos "pornografía alternativa", "cine independiente para adultos" o "erótica", espero demostrar que estoy haciendo algo diferente. En comparación con gran parte del contenido de los sitios de porno gratuitos, mi estilo de cine para adultos difiere en términos de valores cinematográficos y representación del sexo, así como en el proceso de producción. El término "erótica" tiene connotaciones más positivas; la gente piensa en la belleza, el cine y el contexto que creo que describe con mayor precisión mi trabajo.

¿Qué aspectos caracterizan a tus films y los hacen diferentes del resto de las producciones pornográficas?

Quiero enfrentar la pornografía que se enfoca en el placer masculino y el atletismo sexual enfocándome en el erotismo de la sexualidad y de las relaciones humanas. No encasillo a lxs performers en función de su edad, raza, sexualidad o género y, cuando filmo, les permito tener relaciones sexuales que les resulten orgánicas y naturales. Quiero que se concentren el unx en el otrx en lugar de posar para la cámara. Quiero que el sexo sea real y que lxs performers representen una gama más amplia posible de formas e identidades del cuerpo humano.

Quiero mostrar diferentes lados de la sexualidad y de perspectivas cinematográficas, para hacer algo diferente del porno estereotipado producido en masa que puedes encontrar en los sitios gratuitos, y estoy segura de que todo tipo de público puede beneficiarse de ver pornografía hecha a partir de un perspectiva inclusiva.

Al momento de rodar, mi equipo y yo debemos asegurarnos de que el set sea un entorno seguro para el sexo en el que lxs performers puedan explorar su sexualidad de una manera cómoda y relajada. Nos esforzamos para que se sientan libres de expresar sus opiniones y sentimientos, y para detener el rodaje cuando se sientan incómodos por cualquier motivo.

Diría que una de las diferencias más cruciales entre mi porno independiente y el porno convencional es que constantemente muestro mi nombre y mi cara, y comparto mis valores con el público: la gente sabe quién está haciendo las películas y cómo lo han hecho. Para mí, la pornografía es política. Mi tipo de porno lleva tiempo. Se trata de cada pequeña decisión, cada detalle ... todo el concepto es diferente.

¿Cómo es el proceso de creación de una de tus películas? 

Cuando hago una película con mi equipo, hacemos el mismo trabajo que si fuéramos cualquier otro tipo de producción cinematográfica independiente no explícita. A partir de una idea, desarrollamos guiones y moodboards, consultamos a nuestra directora de arte, trabajamos en ubicaciones interesantes y pasamos por un proceso de casting exhaustivo para encontrar el ajuste perfecto para cada papel. Para mí, hacer una película se trata de cuidar cada detalle.

Cuando trabajo en una historia, siempre me pregunto: ¿qué despertó el deseo entre estas personas y por qué? ¿Cómo se seducen y cómo se excitan juntxs? Creo que una película para adultos con imágenes hermosas y una trama cautivadora puede ser mucho más sexy y excitante que la mayoría de la pornografía gratuita que puedes encontrar en los sitios de porno gratuitos, que además muchas veces tienen títulos racistas y misóginos.

¿En qué te inspiras para escribir tus historias y elegir a los actores?

¡Mi público es mi principal fuente de inspiración! Las películas que hago para XConfessions están adaptadas de confesiones sexuales anónimas que recibo del público. Cada mes, mi equipo y yo las revisamos y elegimos dos que nos parecen particularmente inspiradoras para adaptarlas a cortometrajes explícitos. Debido a esto, mi trabajo no sigue un tema o narrativa en particular. Las confesiones que recibo son maravillosamente diversas y sé que nunca me quedaré sin ideas para películas porque ¡la imaginación del público no se detiene!

Hay algunos temas recurrentes en las confesiones, como BDSM y situaciones de sexo en grupo/tríos, pero aunque hay temas recurrentes, cada fantasía generalmente tiene su propio estilo, intensidad y contexto diferentes. Amo las confesiones que evocan un lugar o un sentimiento en mi mente, donde realmente puedo imaginar y sentir las sensaciones que la persona está describiendo.

Leer las confesiones me lleva de vuelta a cómo empezó todo y sigue siendo una de mis partes favoritas del sitio web. Las confesiones me han demostrado que el sexo y la sexualidad no se limitan a una idea estrecha. ¡Recibimos situaciones que nunca antes había considerado sexuales! El sexo puede ser muchas coas, es un universo amplio y hermoso de sensualidad y placer.

Una vez que tengamos una historia, buscamos el perfil más adecuado para cada personaje. Nuestro proceso de casting es largo y minucioso. Conocemos a lxs performers mucho antes de comenzar a filmar, y ellxs también se conocen entre sí para que se sientan más cómodxs entre ellxs.

También tienen la oportunidad de decirnos si hay alguien con quien no quieren trabajar y negociar su paga por el día, independientemente de los actos sexuales que estén realizando o con quién estén teniendo sexo. Siempre nos aseguramos de que sean mayores de 18 años, que hayan tenido sus propias experiencias sexuales, que sean sexualmente positivos y que estén 100% felices y entusiasmados de participar.

Durante los últimos 20 años, he llegado a conocer gente increíble. Buscamos trabajar con performers que compartan nuestra filosofía y quieran hacer cine para asegurar la mejor experiencia para todxs lxs involucradxs. Las personas con las que trabajo son personas fantásticas de todo el mundo que han tomado decisiones conscientes para actuar en el cine para adultos.

¿Hay una búsqueda política en tu arte?

Quería hacer un cambio en la forma en que representamos y, por lo tanto, percibimos el sexo en nuestra sociedad. Quiero cambiar las reglas de la pornografía subvirtiendo los estereotipos de género dañinos y devolver la seducción, el arte y la realidad a las películas para adultos. El sexo es solo un aspecto de nuestras vidas, pero es importante, por eso creo en la importancia de crear escenarios sexuales que sean identificables e inspiradores para la mayor cantidad de personas posible, independientemente de su orientación sexual, expresión de género o etnia.

Debemos dejar de tratar el sexo y la expresión sexual como algo que debe mantenerse al margen de las conversaciones de nuestra vida diaria. Después de todo, ¡todxs somos el resultado del sexo! La positividad sexual está cada vez más normalizada en la sociedad, pero sigue siendo una especie de nicho. Hicimos mucho y, sin embargo, ¡todavía nos queda un largo camino por recorrer!

¿Qué nos podés contar de XConfessions y tu más reciente creación, Else Cinema?

XConfessions fue creado a partir de un blog que comencé para que la gente confesara sus fantasías sexuales de forma anónima. A medida que recibía más y más confesiones, me di cuenta de que algunas de estas historias podían hacer películas perfectas, así que decidí convertir algunas de las confesiones en cortometrajes explícitos. Ahora, XConfessions es una comunidad creciente de espectadores, artistas, directorxs e performers que buscan algo diferente del porno convencional producido en masa.

XConfessions es dónde todo empezó. Es cine para adultos sex positive que desafía las actitudes misóginas, las categorizaciones racistas y las narrativas degradantes de la mayoría de la pornografía convencional. Estoy enamorada de este proyecto, creo que es tan único. La gente puede dejar comentarios sobre las películas y yo trato de responder a todos los que pueda. Realmente se siente como una comunidad, ¡una comunidad en crecimiento de creadorxs y consumidores atrevidos!

En Else Cinema se encuentran versiones no explícitas de las películas de XConfessions y Lust Cinema. He decidido crear Else Cinema para satisfacer las necesidades de la gente que no se siente del todo cómoda con el porno, pero que no quiere renunciar a una experiencia visual que se centre en la seducción. Hay muchas personas que disfrutan viendo sexo en la pantalla para excitarse, pero prefieren una versión menos explícita de nuestras películas para dejar más espacio a su imaginación erótica.

¿Cómo ves a la industria en América Latina, trabajas con directores locales?

Estoy feliz de haber lanzado muchas pelis ambientadas en América Latina en los últimos meses. Es el caso de Carpe Diem, rodada en Venezuela y dirigida por Lis Freimer, o la película del director transgénero Maximus Skaff Rico Rico que documenta la escena queer de Puerto Rico. Y hay más que están siendo producidas ahora mismo para ser lanzadas más adelante en 2021!

¿Cuáles son tus expectativas a futuro para la industria y para tus propios proyectos?

Por lo que estoy viendo, estamos presenciando un cambio general gradual en la industria del entretenimiento para adultos y la necesidad de comenzar a hacer cosas con más valores y mejores condiciones de trabajo para todxs lxs involucradxs. Sin embargo, aún nos queda mucho por hacer. Las posiciones de poder más altas de la industria del porno todavía están dominadas abrumadoramente por hombres cisgénero blancos. Creo en la importancia de la mirada femenina y queer en una industria del porno dominada por hombres. Quiero que la mirada femenina y queer sea una norma y ya no la excepción.

Me encantaría que el porno se abriera camino en el entorno del cine, que mis películas y las de otrxs directorxs alternativxs se proyectaran en los principales cines y recibieran críticas de los medios de comunicación. No quiero renunciar a la independencia de mi empresa, pero sería genial salir del "nicho" y también dar a conocer aún más mi trabajo por las generaciones más jóvenes.