En uno momento deportivo delicado y con un futuro incierto en cuanto a la continuidad del proyecto político, San Lorenzo recibió una dura sanción por parte de la Superliga, donde se le descontaron seis puntos y además se le elevó la prohibición para incorporar jugadores en el próximo mercado de pases.

Lo planteado por las autoridades informa que el club de Boedo no cumplió con lo planteado en sus Declaraciones Juradas en los cumplimientos de los pagos a sus jugadores, y tras no normalizar la situación, se le aplicó la sanción, que también podría salpicar a otros clubes del torneo.

Tras conocerse la medida, el presidente Matías Lammens salió a responder los motivos de la misma, entre los cuales se destaca el cambio de valores a partir de la devaluación del dólar, ya que algunos de los contratos están pautados en la moneda extranjera. Ante esta situación, el club informó de manera formal que apelará la decisión.

"En virtud de la resolución efectuada por el Tribunal de Disciplina de la Superliga en el día de la fecha, en la que aplica a nuestra institución una injusta quita de seis puntos, el Club Atlético San Lorenzo de Almagro anuncia que apelará dicha sanción", recita el texto publicado en la página oficial.

Además, en la misma destaca tres puntos particulares sobre la acusación. En los primeros dos se informa que el "Ciclón" nunca "ha faltado a la verdad" en las Declaraciones Juradas y la devaluación afecto a los contratos en dólares. En el tercero, se resalta un cambio de estructura en cuanto a los controles y auditorías internas para adecuarse a las medidas, y critica la falta de tiempo otorgado por Superliga.