La historia de Atletico Tucumán y la Copa Libertadores es algo increíble. Desde aquel fatídico viaje a Ecuador, en el que tuvieron que sortear diferentes controles aeroportuarios, como así también recibieron la ayuda del embajador y utilizaron ropa de la Selección Argentina, hasta la noche del 18 de abril, donde hicieron historia.

Con cero puntos en los dos encuentros disputados ante Peñarol y Libertad, el "Decano" llegaba a Bolivia con la idea de buscar un empate que le de algo de vida. Sin embargo, el destino le tenía preparado un premio que, según el desarrollo del encuentro, fue un milagro.

Con la dificultad de jugar en los 3640 metros de altura de La Paz, el conjunto argentino se quedó con el partido por 2 a 1, gracias a los goles de Romat, quién justificó la frase "la pelota no dobla", con un tremendo zapatazo, y Toledo, luego de un grave error de The Strongest en defensa, que parecía tener todo para ganarlo.

Con la figura de Augusto Batalla en el arco, los palos en favor de los tucumanos y un insólito 28% de posesión de pelota, Atlético rompió una racha de 48 años de equipos argentinos sin victorias en dicha ciudad, desde la victoria de River ante Universitario, en 1970. A partir de allí pasaron 19 partidos, lo que agiganta aún más este partido,

Con esta victoria, los de Zielinski se ponen en la misma línea que Peñarol y The Strongest, con tres unidades, peleando directamente el segundo lugar, ya que Libertad respira con 9 unidades. Ahora, recibirá a los bolivanos con el objetivo de buscar la clasificación.