En medio del mercado de pases, Independiente sumó su quinta inhibición por parte del TAS luego de no pagarle a Pumas (México) la deuda que mantiene de 70 mil dólares por el pase del uruguayo Gastón Silva.

En este sentido, se informó que el club de Avellaneda debe abonar en total cerca de 1.2 millones de dólares para contratar refuerzos de cara al 2022, cuando participará de la triple competencia luego de clasificar a la Sudamericana.

Un vocero de la comisión directiva explicó: "Lo de (Gastón) Silva es por la apelación que hizo por el caso Pumas, determinando el TAS que por esa acción los gastos le correspondía a Independiente y no al jugador. Es más, en febrero debe salir el fallo por el juicio laboral interpuesto por el uruguayo", en diálogo con Télam.

Asimismo, añadió: "A esos 70 mil dólares se le deben sumar los montos de las otras inhibiciones: la del representante del ecuatoriano Fernando Gaibor, José Chamorro, por el reclamo de de 220 mil dólares; así como la de Defensor Sporting por la ficha de Carlos Benavídez, 291 mil dólares".

"Hay una de Celta de Vigo por el pase de Pablo Hernández que es de 410 mil dólares; y la de Johor, de la Superliga de Malasia, por el préstamo de Jonathan Herrera, 200 mil dólares. Lo que hace un monto total de 1.191.000 dólares", describió sobre la lamentable situación que atraviesa el equipo dirigido por Eduardo Domínguez.