El jugador de la Juventus, Cristiano Ronaldo fue denunciado por violación por dos mujeres y tanto su equipo, las marcas a las que representa como los medios de comunicación, tejen una red de cuidado para con el astro del fútbol que sólo tiene una lectura: protección de pares. 

Mientras la Justicia investiga al millonario jugador por el supuesto abuso a dos mujeres en un hotel en Las Vegas, titulares del mundo lo presentan como víctima con títulos como "La pesadilla de Cristiano" y su club, la Juventus, lanzó un comunicado en donde lo defiende a capa y espada. 

Por su parte, el DT de Portugal, Fernando Santos, fue consultado por el hecho y también lo defendió: "Conozco bien a Cristiano y no creo que haya cometido un delito de ese tipo" y se sumó a la declaración del presidente de la Federación de fútbol de Portugal, quien expresó su "total solidaridad" con el jugador.

Con un color parecido pero tomando una postura más criteriosa, se encuentran las marcas que, al parecer, entienden el cambio cultural que se vive e intentan despegarse de un un jugador que hoy se encuentra en el banquillo de los acusados. La marca deportiva Nike declaró a los medios estar "profundamente preocupada" por la acusación y aseguró que seguirán "monitoreando de cerca la situación". 

EA Sports, por su parte, sostuvo que sacará su imagen del sitio oficial de FIFA 19, así como de sus diferentes redes sociales. Por lo pronto, al chequear en su web, la figura de la Juventus continúa estoica.   

Dentro de la jerga feminista, la cultura de la violación es un término que se usa para indicar un grave problema social que naturaliza y normaliza actitudes machistas en términos de violencia sexual. Esto incluyen culpar a la víctima, la cosificación sexual, la trivalizacion de la violación, la negación de violación o de daños que dejan este tipo de abusos.

El "pacto entre machos" es una herramienta fundamental para esta estructura que se basa en una red invisible de acuerdos y protección entre los varones ante este tipo de situaciones. Minimizar o negar procesos judiciales sobre abuso sexual o cuestionar a la víctima y no al victimario, son mecanismos que se repiten una y otra vez, particularmente en el mundo del fútbol. 

Si bien aún no hay una sentencia como para declararlo culpable de abuso sexual, tampoco la hay para declararlo inocente. Pero eso a la Juventus, a los medios y a las marcas parece no importales demasiado.