Continúa la investigación por el presunto femicidio de Ivana Molina, la mujer que continúa desaparecida hace 40 días en la localidad mendocina de Las Heras y de la que se sospecha que fue asesinada por su pareja, un hombre de 64 años que fue detenido en Buenos Aires mientras escapaba de la justicia.

Esta vez, los investigadores encontraron rastros de sangre en la casa de la mujer y los peritos determinaron que pertenecen a la víctima. Dichas manchas fueron encontradas en un colchón y en el baño de la vivienda en la que Molina convivían con el ahora acusado, Carlos Miguel Díaz Vilchez.

Vilchez, de profesión albañil, fue apresado la noche del 3 de mayo en la localidad bonaerense de Pablo Nogués, luego de fugarse de Mendoza y de que la justicia mendocina ordenara su captura por "homicidio agravado por la relación de pareja preexistente y por mediar violencia de género" de Molina.

(Carlos Miguel Díaz Vilchez junto a Ivana Molina)

Bajo las directivas de la fiscal de Homicidios Claudia Ríos, los peritos trabajaron en la casa de la mujer desaparecida y tras el hallazgo de los rastros el cotejo de ADN confirmó que se trataba de la sangre de Molina.

En tanto, el abogado defensor del albañil, Marcelo López, sostuvo que se trataba de "gotas o sangre vieja" y que "ella (por Molina), por determinadas adicciones o situaciones personales, sangraba fácilmente de la nariz, o a veces porque le subía la presión y se hacía un cortesito de una gotita de sangre en los dedos, como se hace a veces en los insulinodependientes, no sé si es lógico, pero es esperable", añadió.

A su vez, el letrado aclaró que, "si bien se veían los fines de semana, habían dejado de convivir y de ser pareja estable". Vale recordar que Díaz Vilchez tiene antecedentes y denuncias previas de Molina por varios hechos de violencia de género.

La búsqueda de Ivana

La investigación se inició el 10 de abril pasado con la denuncia de la sobrina de la víctima, quien declaró que desde el primer día de ese mes que no veía a su tía y que cuando le consultó a Díaz Vilchez, este le dijo que hacía tiempo que tampoco la veía.

Al respecto, la hermana de Ivana dijo que no tiene "ninguna duda" de que el acusado está involucrado en la desaparición porque "era una persona violenta, porque la golpeaba, porque la marcaba por todos lados".

Según las fuentes, al inicio de la pesquisa, el albañil declaró que la última vez que vio a su pareja había sido el 31 de marzo, pero se corroboró que el dato no era cierto porque varios testigos declararon haberlos visto juntos en una fiesta el 7 de abril.

Díaz Vílchez se había fugado de la provincia de Mendoza tras pagarle 60.000 pesos a un remisero trucho, por lo que la justicia de esa jurisdicción pidió la colaboración de los detectives de Homicidios de la PFA que localizaron y finalmente detuvieron al prófugo en Buenos Aires.