A partir del viernes el clima en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) comenzó a cambiar, la temperatura se elevó y el fin de semana llegó acompañado de un fenómeno que trae consigo el calentamiento global.

Durante el sábado, la temperatura máxima se ubicó por encima de los 20 grados, la humedad subió considerablemente al punto de superar el 75% y habría una probabilidad de entre el 40 y el 70% de lluvias para la noche. 

Mientras tanto, según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), el domingo se prevé un descenso de la temperatura que la ubicará en los 9 grados de mínima a los 17 de máxima. Se estima que el cielo estaría parcialmente nublado y con vientos del sector suroeste.

Además, el calor que se sentirá en varios puntos del país viene de la mano del viento norte que afecta al extremo norte argentino y las regiones de Cuyo y Pampeana. Desde el SMN se aseguró que “esta masa de aire provocará temperaturas de hasta 4 y 5 °C por encima de lo normal en el Noroeste Argentino y el Litoral, pero no durará mucho”.

A pesar de que muchos disfrutaron esta mini primavera, todo terminará el próximo lunes debido a que se espera el regreso del frío con mínimas de 9 grados y máximas de 14 grados. Esto se mantendrá a lo largo de los días, ya que, tanto el martes como el miércoles habrá temperaturas similares y una muy baja probabilidad de precipitaciones.