Durante el pasado fin de semana, fuertes lluvias provocaron inundaciones en los estados de Baviera y Baden-Wurtemberg y como consecuencia cuatro personas fallecieron. 

Las víctimas hasta el momento son: una mujer de 43 años que fue encontrada en un sótano en la ciudad de Schrobenhausen, un bombero que falleció el domingo en Pfaffenhofen y una pareja que fue encontrada en un sótano en Schorndorf.

Además, 3.000 personas tuvieron que ser evacuadas y las lluvias provocaron perturbaciones en el transporte, por lo que muchas rutas ferroviarias de larga distancia hacia Múnich quedaron fuera de servicio.

Según el Servicio Bávaro de Información sobre Inundaciones, el nivel del agua en un punto de medición alcanzó los 5,90 metros, cuando el pasado martes era todavía de unos 2,70 metros. Durante la última gran inundación, el 4 de junio de 2013, había llegado a 6,82 metros.

El Canciller alemán Olaf Scholz, comentó que “este no es simplemente un suceso como los que ha habido ocurrido durante siglos”, y advirtió que “no podemos descuidar la tarea de detener el cambio climático provocado por el hombre”.

El Servicio Metereológico Alemán alertó de que continuarán los chubascos con posibilidades de lluvias fuertes en algunas zonas.