Sol Fantín, autora de “Si no fueras tan niña”, es la nueva invitada de Cable a Tierra, el podcast de Filo.news, conducido por Erika Cabrera y Alejandro Segade. Durante la entrevista, la escritora se refirió a la controversia en torno a su libro, que forma parte del programa educativo "Identidades bonaerenses", del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, y fue apuntado, junto a otras obras, por la supuesta difusión de contenido explícito.

"La literatura ofrece oportunidades de reflexión sobre el mundo. Las personas que trabajan sobre la literatura, sobre todo en espacios educativos, a partir de edades tempranas, puedan tomar distancia, formar criterios propios. La ficción y la literatura permiten generar, en el caso de que haga falta, defensas contra determinadas violencias o situaciones que socialmente nos cuesta procesar, como son la sexualidad o la violencia", sostiene Sol.

Mirá la entrevista completa

Sol es docente y escritora. Su libro "Si no fueras tan niña", un ensayo que relata el abuso que sufrió entre los 13 y los 21 años por parte de un profesor de una institución pseudo-religiosa donde estudiaba, quedó envuelto en medio de la controversia que se generó con un conjunto de obras distribuidas por el Gobierno de la provincia de Buenos Aires en escuelas del distrito por la supuesta difusión de contenido sexual. La vicepresidenta Victoria Villarruel acusó al mandatario provincial de "pervertir" a los niños y el Gobierno provincial habló de "censura" por parte de los dirigentes nacionales.

"En un momento como el actual, donde los los niños, las niñas y sobre todo los adolescentes, están expuestos a un bombardeo mediático a través de redes sociales, videojuegos, a distintos tipos de materiales, mensajes que pueden resultar pueden poner sobre la mesa tanto la violencia como la sexualidad sin el acompañamiento de un adulto; es muy importante que la escuela tome a su cargo el trabajo de este tipo de temáticas, desde la literatura específicamente y también desde la no ficción", dice la autora. También remarca que su libro "fue seleccionado por un comité de expertos, lo que indica que tiene un valor literario y cultural que trasciende mi experiencia personal como sobreviviente", y advierte que "difundir un fragmento especialmente complejo de un libro, fuera de contexto y en medios masivos, es un acto de enorme irresponsabilidad".

Sobre su historia, cuenta que "demoré más de 20 años en poder hablar entre otras cosas porque yo tenía miedo de sufrir, de ponerme en peligro si hablaba".

"Si yo tuviera que hablar con una persona que está pasando efectivamente por un abuso en este momento o que sigue viviendo sus secuelas, primero le diría que lo siento muchísimo, que lo siento muchísimo, que la abrazo, que no tiene la culpa por mucho que se lo hayan hecho creer y que el silencio nunca nos va a proteger", afirma.