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Grooming: ¿estamos ante una mayor amenaza o frente a una oportunidad?

Ante el estallido del COVID-19 y el aislamiento social como medida de prevención, la virtualidad se convirtió en el único contacto de los menores con sus amigos, y con el mundo. ¿Esto los deja más vulnerables frente a potenciales acosadores? ¿Cómo aborda este delito la escuela, que también debió adaptarse a la digitalidad? ¿A qué debemos estar atentos? ¿Y cómo debemos cuidarnos? 

Grooming: ¿estamos ante una mayor amenaza o frente a una oportunidad?
Grooming: delito de acoso sexual a menores por Internet

A toda hora, en todo momento. Basta sólo con un par de clicks, algunos datos personales, y algunas fotos para generar un perfil en cualquier red social. Facebook, Instagram, Whatsapp, Twitter, TikTok. Aplicaciones, juegos en línea, páginas.

La virtualidad forma parte de nuestro todos los días: desde hacer un trabajo práctico, realizar una investigación, así como informarnos y entretenernos. Lo que antes parecía existir como un universo ajeno, ya está lejos de serlo, y muchos de los vínculos que allí fomentamos se vuelven más reales de lo que a simple vista parece. ¿Y qué sucede cuando estos vínculos se dan únicamente a través de la virtualidad?

Hace más de 100 días, miles de menores no salen de sus hogares, lo que limita su socialización a un sólo canal de contacto. Charlar con sus amigos, ver a sus familias, aprender en el marco escolar. Todas sus relaciones fluyen hoy con una pantalla de por medio. Y allí, surgen las primeras alertas. ¿Qué es el Grooming?

Se trata de un delito mediante el cual un adulto vulnera a un menor a través de una platafoma virtual con el fin de abusarlo sexualmente, ya sea de manera física o bajo la extorsión, y pedido de contenido que puedan comercializar en páginas, teléfonos y otros canales. Estos groomers suelen suplantar su identidad para así ganarse la confianza de aquellos niños y adolescentes que se encuentran del otro lado.

Actualmente, y de acuerdo a una campaña movilizada por la ONG Mamá en línea -organización sin fines de lucro gestada por familiares de víctimas y colaboradores en pos de visibilizar la problemática- "1 de cada 5 menores es acosado sexualmente en línea, 4 de cada 10 han recibido mensajes con contenido sexual explícito y 9 de cada 10 adultos no se enteran de que sus hijos han sido acosados".

Integrantes de la ONG Mamá en línea | Foto: Gentileza Roxana Domínguez

Hace once años que sus fundadoras, luchan por una Campaña Nacional de Grooming, que hoy impulsan junto al Ministerio de Educación, titulado por Nicolás Trotta. Oportunidad: la pandemia funciona como el contexto para gestar uno de los aportes más valiosos de los últimos tiempos en el país. 

"Es una campaña permanente de prevención y concientización, que abrace a todo el país y que todos puedan ser parte", expresa con lágrimas y emoción a flor de piel, Roxana Domínguez, presidenta de la organización en diálogo con Filo.News.

Causalidad o casualidad, lo cierto es que mientras cientos de niños, niñas y adolescentes permanecen conectados a la web en tiempos donde se desdibujan aún más los límites de horario, y su socialización parece estar meramente restringida allí, la Campaña Nacional de Grooming significa un acompañamiento para desmantelar la perversa trama de los acosadores en línea.

Aislados pero ¿bien? conectados

Con la cuarentena se produce esta significativa paradoja. Hace más de tres meses que los menores conforman una de las poblaciones que menos salió de su casa ante el contexto de la pandemia. Por temor al peligro afuera, permanecen adentro, y es justamente adentro, donde aumenta la demanda la utilización de diversos dispositivos electrónicos. ¿A qué peligros se exponen pese a no cruzar el umbral de la puerta?

"Si bien la socialización de los chicos y adolescentes ya se venía generando desde lo virtual, era una de las posibilidades que tenían para relacionarse; pero ahora es la única. Entonces ahí sí se produce un cambio. Si yo tengo la posibilidad de ejercer un contacto mediante red social con una persona que al día siguiente la voy a ver, por ejemplo en el ámbito escolar, me condiciona a hacer o decir ciertas cosas porque después voy a mantener con esa persona un contacto real. En cambio, en este momento eso no sucede. Hay un condicionamiento, un giro, una vuelta de tuerca en este tema", plantea Romina Castro, vicedirectora con perspectiva de Educación Sexual Integral (ESI) que ejerce en una escuela pública de la Ciudad de Buenos Aires, en el barrio de Almagro.

"Claramente el contexto de pandemia ha profundizado la relación con lo digital. Nosotros hace años venimos avisando cómo los chicos pasan cada vez más tiempo conectados, viviendo su vida a través de lo digital: interrelacionándose con sus amigos, sus familiares. Con la pandemia ya no es una opción, se vuelve su única manera de interactuar con el mundo, se profundiza el rol que cumple lo digital. Al mismo tiempo, postcuarentena también se dará una re-definición o un re-análisis y va a ser un desafío lograr que los chicos vuelvan a reconectar con esta combinación entre el mundo analógico y el digital", complementa por su parte, Sebastián Bortnik, experto en Seguridad Informática y director del equipo de investigación en la empresa argentina de ciberseguridad, Onapsis.

Sebastián Bortnik

En este contexto, en tiempos donde la relación de los niños y adolescentes se limita a un dispositivo tecnológico, surge un interrogante: ¿se incrementaron los casos de Grooming durante la cuarentena? 

Interrogrante que los especialistas, deconstruyen. "Por supuesto que estando más tiempo con las tecnologías hay más probabilidades de que esto pase pero me parece que la varianza es menor y en el fondo, cualquier persona que sabía cómo cuidarse en Internet va a saber hacerlo estando tres o seis horas frente a las tecnologías. Creo que problemáticas como el Grooming pueden suceder también fuera de la cuarentena", advierte Bortnik, uno de los principales fundadores de Argentina Cibersegura, organización líder en la navegación y uso responsable de la web. "Muchos sostienen 'la cuarentena nos pone más en riesgo', y no lo que nos pone más en riesgo es el desconocimiento, la falta de información, el manejo sin cuidado", diferencia. 

"No sé si están más expuestos o no; eso sería algo a debatir porque también es cierto que las familias están más presentes en el uso de esa virtualidad", añade por su parte, la educadora Castro. "Porque como la escuela está sucediendo desde casa, más allá de que los chicos y chicas más grandes tienen más autonomía en el uso de las tecnologías y los más pequeños no tanto, las familias están más atentas. Ahora, eso no significa que están presentes todo el tiempo. La virtualidad nos hace creer que tenemos un lugar de impunidad que es incorrecto. Y ese es un gran punto a trabajar con los chicos: lo que yo digo y comunico a través de lo virtual sigue siendo tan importante y real como lo que me sucedía en la escuela o en algún ámbito de socialización", sostiene.

Educar.nos

Si bien no hay que dejar de estar atentos, es importante resaltar que todo lo que sucede a través de las redes sociales o de espacios virtuales no es negativo. Desde las diversas formas de conectarse, hasta los canales de información disponibles con fines divulgativos y de aprendizaje colectivo resaltan valores sociales, así como también, la disminución de muchas fuentes de contaminación y explotación.

Consultorio ESI es uno de estos espacios. Formado por tres profesionales -dos psicopedagogas y una profesora de química y biología- que trabajan en una misma institución educativa. Juntas reconocieron la necesidad de generar un ambiente de aprendizaje con perspectiva en la Educación Sexual Integral, que acompañara el desarrollo de sus estudiantes. "Nos vimos en la demanda de recoger el guante de los pibes y pibas, con el interés de seguir profundizando todo lo que tiene que ver con la ESI más allá de lo que se trabaja en la escuela, y así pensamos una página que responda pero que esté sostenida con conocimientos que estén validados científicamente", mencionan.

Grooming | Foto: Instagram @consultorioesi

Su cuenta de Instagram cuenta con más de 46 mil seguidores, y ofrece publicaciones con una variedad de temáticas abordadas con perspectiva de género. ¿Cómo es posible generar concientización en las diversas redes sociales y formas de juego en los menores, que son las víctimas de este delito?

"La concientización me parece que va por varias vías. Por un lado la escuela, permanentemente concientiza cuando trabaja las cuestiones que tienen que ver con el uso irresponsable de las redes pero también cuando en la narrativa familiar aparece esta cuestión y se da la posibilidad de plantear dudas o experiencias propias sin escandalizarse, se habilita la posibilidad de expresar conflictos, temores, ansiedades, angustias. Hablar, hablar y hablar. Los adolescentes creen que se las saben todas y que a ellos no les va a pasar nunca, que nadie va a engañarlos en las redes y que saben manejar las situaciones, pero las personas que violentan a través de la virtualidad suelen ser altamente manipuladoras y generan una relación de asimetría, por lo que muchas veces los chicos y chicas no se dan cuenta de la información que están brindando. Por eso, el camino es fortalecerlos, fortalecer el valor de su autoestima me parece que es la salida", expresa Silvina, pedagoga e integrante de Consultorio ESI

  • El caso de los chicos y adolescentes en cuarentena

Pasados los tres meses de aislamiento es fundamental repensar el discurso romántico que asegura que los menores se encuentran refugiados en sus hogares. 

"Nosotras desde siempre intentamos desromantizar la cuarentena porque es la respuesta a una problemática sanitaria muy seria y que tiene coletazos a nivel social. Muchos colegas plantean la angustia que sienten diversos chicos y chicas, el agotamiento por la sensación de vacío. Creo que la cuarentena genera en muchos chicos y chicas la imposibilidad de ver proyectos a futuro, ya que se ven rodeados de toda una situación de incertidumbre. Esto nos posiciona a los adultos en un lugar de mucho compromiso respecto a la contención y a identificar todas las problemáticas que vienen como consecuencia del estar en aislamiento: trastornos de sueño, de la alimentación, consumos problemáticos de redes y televisiónLa cuarentena funciona como una lupa, donde las dinámicas disfunsionales familiares se ven de una manera mucho más agrandada. Esto genera un gasto energético importante y una necesidad de procesar algunas cuestiones", menciona la pedagoga Silvina.

Bajo la perspectiva de Bortnik, el aislamiento podría servir como coyuntura en la lucha contra el Grooming, y donde surge una problemática, se moviliza la acción social. "Creo que la pandemia nos da una oportunidad como adultos: aprovechar que estamos mucho tiempo en el mundo digital para generar los diálogos que tenemos que generar. Acá hay un punto importante. Pienso que tanto colegios como familias tienen hoy la oportunidad de cambiar esta situación y hablar sobre la navegación segura en Internet, del uso sano de las tecnologías en un contexto que brinda una excusa para hablarlo", considera.

Grooming y ESI: ¿cómo trabaja la escuela?

Con diversos desafíos, la educación también tuvo que adaptarse a la virtualidad. "El discurso romántico de estar resguardado en el hogar tiene clara implicancia política y fue necesario al principio para que se entienda esta idea de cuarentena, que ya se fue perdiendo desde el temor de cada ciudadano. Porque acá lo importante es la suma de individualidades para el armado de un accionar colectivo que ya está fallando", visibiliza Romina Castro, vicedirectora. 

"Desde que existe la ESI, nosotros podemos generar espacios para darles la palabra a los pibes para que nos puedan hablar de todo lo que les sucede. Y en este camino, encontramos un montón de situaciones donde los hogares no son de resguardo. A partir de ello accionamos de distintas maneras. En principio para que más allá de lo presencial, de que nosotros no estamos dentro de la escuela, estos espacios no se pierdan. Y es por eso que ahora que la socialización de los chicos es puramente virtual, nosotros accionamos con medidas de prevención, del buen uso de Internet, de las redes sociales, las formas correctas de valorar y manejarnos con los otros. Todo esto empieza a abrir el camino hacia el trabajo específico contra el Grooming: trabajar desde el cuidado del propio cuerpo, que nadie nos puede obligar a hacer algo que no nos gusta; hasta las formas de asearse uno mismo para evitar que otro tenga derecho sobre mi cuerpo. Hay diferentes ejes en la ley de ESI, y cada uno va abarcando -dependiendo de las necesidades de la edad- todo el camino posible para trabajar los contenidos que son necesarios. A partir de la aparición de diferentes casos, ya se pone más sobre el tapete el tema del Grooming y principalmente ahora que es un buen contexto para trabajarlo", manifiesta la vicedirectora.

Romina Castro
 

Los materiales están a disposición. Dentro del Ministerio de Educación, el coordinador Adrián Mansur creó un espacio que se encarga de las capacitaciones y la llegada de ESI en las escuelas. Allí se brinda también cuadernillos y materiales sobre la temática. Además, muchas instituciones cuentan con el Equipo de Orientación Escolar (EOE), formado por trabajadores sociales, psicólogas, psicopedagogas.

A la visión de la vicedirectora, se suma la de las profesionales de Consultorio ESI, que detallan: "Si tendríamos que focalizar en un eje para trabajar la navegación segura en Internet y las relaciones a través de las redes, sería valorar la afectividad, que justamente plantea los tópicos del cuidado y del autocuidado en las vincularidades. El tema del Grooming específicamente se trabaja en el marco del respeto hacia la propia intimidad y dando tips concretos en el uso responsable: no dar datos personales, no contactarse con gente que no se conoce, no dar ningún indicativo de la identidad y del lugar donde están escribiendo, no mostrar zonas de la casa que podrían servir para identificar direcciones; pero por sobre todo se trabaja desde la prevención, no exponerse y saber que cuando una información entra en el ciberespacio, es difícil y prácticamente imposible recuperarla". 

"Cuando estás trabajando estereotipos de género a partir de un juguete, también estás trabajando tu cuerpo y tus emociones: ¿qué te pasa a vos con ese juguete? ¿por qué no podés jugar al fútbol? ¿qué es eso de que el cuerpo de las nenas es delicado y debe encargarse de las tareas del hogar? Todo esto lo abordamos constantemente, más allá de que hay cuadernillos y contenidos exclusivos para el Grooming porque si bien estos recortes son integrales y están atravesados por todo el resto de miradas que tiene la ESI, necesitás ponerle un nombre para accionar desde ahí: 'esto se llama así y hay que hacer esto'. Muchas veces eso que uno baja desde los contenidos y con la mejor intención ayuda a los chicos a reconocer algo que sucede con alguien de confianza y donde las líneas de lo permitido y lo prohibido se desdibujan. Los caminos a seguir siempre son: tener muchísimo cuidado, no revictimizar a la persona que está sufriendo, y asesorarnos con los profesionales correspondientes", complementa Romina Castro.

La lucha de Roxana, "resiliencia" para algunos, y la fuerza en pos de un logro colectivo

"Son emociones encontradas, porque si bien estamos contentas de por fin alcanzar una campaña que abrace al país en esta problemática, en el camino hemos perdido vidas. En lo personal tenía una necesidad fuerte de creer en mi Nación, sobre todo cuando hablamos de Derechos del Niño, y cómo debe responder el Estado. Siempre apoyándonos en los artículos de la Convención de los Derechos del Niño (artículos, 19 y 34) donde queda bien plasmado la responsabilidad gubernamental de quienes nos representan. Por fin llega la Campaña que esperamos por 11 años", menciona Roxana y recuerda cómo fue su camino personal hasta hoy.

"Vivirlo en primera persona, como familia no fue fácil. Mi hija fue victima de este delito en el año 2009, tiempos donde había mucho mas desconocimiento", recuerda. Su hija tenía 13 años cuando descubrió que era acosada por un adulto a través de un grupo de Facebook. La vulneración psicológica hacia la niña fue tal, que su madre tomó su rol y persiguió al groomer hasta México: donde descubrió que se trataba de una mujer, que finalmente, de rodillas, le pidió perdón.

En el camino por encontrar una respuesta de un delito que aún ni estaba tipificado en la Argentina, conoce a Rosa Castro, quien se convirtió en una de sus mayores compañeras de lucha. "Su hija también había sido abordada por Messenger por una identidad falsa el mismo año. La diferencia entre ambas fue que a mi hija la contactó un perfil de hombre que resultó ser una mujer y estaba en el extranjero, mientras que a la hija de Rosa la localiza el hijo de su jefe. Fue allí en Río Negro, donde el abogado defensor de este hombre sostuvo en los medios  de comunicación que su cliente se dedicaba al Grooming: contactar menores por Internet para satisfacerse sexualmente y que en Argentina no era delito", recuerda, sobre lo que fue un determinante punto de inflexión.

Rosa Castro y Roxana Domínguez, fundadoras de Mamá en línea | Foto: Gentileza Roxana Domínguez

Claramente debíamos tipificar el Grooming en el Código Penal, no fue un camino fácil. En ese entonces, la senadora María José Bongiorno (Frente para la Victoria) presentó un proyecto que penalizaba el Grooming. El proyecto fue aprobado en el 2011 en senadores y luego llegó a diputados en el 2013. Casi perdía estado parlamentario. Fueron ocho meses de ir y venir, reuniones con diferentes diputados, comisiones;  un desgaste al alma porque a pesar de que se aprobó en diputados, como tenía modificaciones, volvió al Senado. Finalmente llegó el día: el 13 de noviembre del 2013 se sanciona la ley, y por fin teníamos una legislación que tipificaba al Grooming como delito en nuestro código penal", celebra con emoción. La fecha conmemora la lucha contra el Grooming en el país.

La Ley 26.904 pena con prisión de "seis meses a cuatro años el que, por medio de comunicaciones electrónicas, telecomunicaciones o cualquier otra tecnología de transmisión de datos, contactare a una persona menor de edad, con el propósito de cometer cualquier delito contra la integridad sexual de la misma".

  • #MicaOrtega: una deuda social

"La Ley #MicaOrtega implementará una Campaña Nacional permanente de concientización y prevención del Grooming", afirma Roxana, quien no puede evitar conmoverse al recordar a Mica. La niña oriunda de Bahía Blanca tenía doce años cuando fue engañada por Jonathan Luna a través de un perfil falso en Facebook. Detrás de "Rochi de River", Luna no sólo la vulneró, sino que la persuadió para encontrarse en un descampado en Ingeniero White, donde acabó con su vida el 23 de abril de 2016. Su familia estuvo buscándola durante más de un mes.

"Aún recuerdo ese día, vimos la noticia por televisión: desapareció una nena de 12 años en Bahía Blanca. Al escuchar a Mónica, su mama, decir que algo pasaba por las redes sociales, automáticamente sentimos un nudo en nuestro pecho; y ni hablar que a los 35 días apareció muerta, se nos perforó el alma. Ya veníamos pidiendo una campaña junto con la Ley. Aún se me caen las lágrimas", lamenta Roxana, ante la impotencia de un Estado que pudo haber evitado la pérdida de Mica.

 

En el año 2014, Mamá en línea visitó Bahía Blanca, donde consiguió que el Consejo Deliberante aprobara por unanimidad la Campaña por Grooming en su municipio. "Sin embargo, no se la dieron a la sociedad; duele", continúa la presidenta de la organización. 

El caso de Mica Ortega es paradigmático en la lucha contra el delito en la Argentina. No sólo fue el primer caso en llegar hasta Facebook (un juez de Estados Unidos permitió acceder a los fragmentos de las conversaciones del chat entre la niña y el perfil falso del acosador, además de aportar el número de IP); sino que se convirtió en el primer juicio por Grooming seguido de femicidio en el país. El 19 de octubre de 2017, Jonathan Luna fue condenado a prisión perpetua.

La fortaleza de su madre, Mónica Cid -acompañada por su abogada, María Fernanda Petersen y al fiscal Rodolfo de Lucía- fue el motor, un homenaje que las mujeres de Mamá en Línea le atribuyen con cada avance para detener el delito.

La lucha de su madre, Mónica Cid

"Mica está muerta. Esto no debió pasar si las diferentes instituciones que tenían la responsabilidad hubiesen accionado. Una ley no alcanzaba, y aunque lo repetimos hasta el cansancio, nadie hizo nada para que no pasara; la angustia de que siempre se actúa ante una emergencia o perdida de una vida y eso es llegar tarde", manifiesta Roxana, quien aún recuerda la primera vez que abrazaron a Mónica. Mientras las madres se abrazaban y se organizaban, el Estado miró hacia otro lado.

¿A qué tenemos que estar alerta?

Fundamentado por su experiencia durante años en ciberseguridad y Grooming, problemática que lo llevó a organizar diversas charlas TEDxRiodelaPlata como "Grooming, el acoso ¿virtual?" (2016) y "El futuro de la privacidad" (2020), Sebastián Bortnik identifica una serie de cuestiones.

"Hay que prestar atención cuando esas instancias son significativas: si un chico está jugando a la play y pasa de un juego a otro, quizás no va a ser tan significativo como si de repente pasa a una red social donde puede publicar fotos. Acá hay un tema clave: el acompañamiento de los adultos en la crianza digital de los chicos. Lo que propongo es el diálogo. Nosotros tenemos que estar constantemente hablando con los chicos para entender cuáles son las aplicaciones que están utilizando y en cual se están registrando; indagar sobre esa aplicación, entender cuáles son los riesgos. Esa instancia de diálogo con los adultos, por supuesto no es la garantía pero sí hace una gran diferencia en aquellos menores: 'Fijate que puede pasar esto', 'Esta persona puede no ser quién dice ser', '¿Qué vas a subir?', '¿Dónde está el límite de tu intimidad?', '¿Podés filtrar cómo hacen Facebook e Instagram? ¿o lo que vas a subir lo pueden ver todos tus seguidores?'. Este diálogo le va a dar al menor la confianza y la seguridad, que es lo que ellos buscan", recomienda.

Aquí, un tema clave en ocasiones se genera en las familias una culpabilidad social que los recrimina ante esta clase de delitos, cuando no hay que perder de vista que es el Estado quien debe brindar políticas de seguridad para proteger a los niños y adolescentes. Lo que no quita la importancia de la comunicación y la confianza que se genere con los adultos.

"Como madre que me tocó vivir esto, es necesario conocer el sistema de navegación donde nuestros hijos interactúan, la mayor parte del día. Me refiero a que hay edades para ciertas aplicaciones, y redes sociales. Y es cierto que es el Estado quien debe desarrollar las políticas publicas de protección y seguridad, pero los padres somos parte. Miembros de la organización más fuerte que es la familia, y desde ahí en el mientras tanto debemos educar a nuestros hijos para que interactúen con responsabilidad y que no tengan miedo al uso de la tecnología y que ante cualquier propuesta extraña nos avisen, tal cual lo harían en la vida real", señala Roxana.

"El acosador busca en espacios públicos, Internet es un espacio público. Ahí encuentra menores a la carta dirían muchos. Bajo un perfil falso selecciona a su victima y comienza a interactuar con mentiras, engaños hasta vulnerarlo. Y debemos tener en cuenta que si la distancia lo permite van al encuentro, y ahí estás hablando de otros delitos como el abuso concretado y muchas veces la muerte", añade la presidenta de Mamá en línea sobre el mecanismo al que aluden los groomers.

Grooming: acoso sexual a menores a través de la web

Sebastián Bortnik, profundiza en el comportamiento de los acosadores virtuales. "La primera cuestión es que tienen mucha paciencia. Quizás hay un imaginario de que los chicos comienzan a chatear con un adulto y a los 5 minutos, los están citando o les están pidiendo fotos; y cuando uno ve casos reales empieza a notar que entre las víctimas y los acosadores pueden llevar días, semanas y hasta meses. Tienen tiempo a su disposición. Están chateando con otras potenciales víctimas simultáneamente. El no estar apurados les da cierta ventaja. Esa es una ventaja importante para la prevención, desde el punto de vista que, si le damos las herramientas a los menores también hay una ventana de tiempo para que puedan detectar que hay una potencial amenaza y frenar a tiempo", sostiene y recuerda el caso de Jonathan Luna, quien tenía alrededor de tres perfiles falsos, donde se contactaba con cientos de niñas menores de edad.

"Esta es otra característica: no están limitados a una sola víctima, sino que están constantemente buscando.
Los groomers generan una empatía importante con los menores porque siempre les dan la razón. Es algo que siempre tenemos que identificar cuando hablamos con los menores: eso no es amistad, no es amor, es otra cosa. 'Si a los chicos les fue mal en el colegio, los profesores son malos'; 'si discutieron con la familia, son malos'; 'si vos sos de River, el groomer también' (como le ocurrió a Mica Ortega). Y entre los 9 y 12 -la edad en la que son más vulnerables- como todavía no crecieron y emocionalmente hay mucho que desarrollar porque están encarando la adolescencia, son muy permeables a sentir que del otro lado hay una verdadera amistad y que hay alguien ahí que los entiende, cuando en realidad los está engañando", complementa y detalla cuestiones que tienen que ver más con un perfil específico. En la mayoría de los casos el acosador tiende a ser de género masculino en un rango de edades entre 25 y 40 años.

Bortnik enfatiza en tres estrategias para concientizar: asumir la responsabilidad como adultos, informarse y dialogar. "Hace mucho tiempo nos decían en el colegio que lo que pasaba en las redes sociales estaba fuera de las paredes del colegio por lo que no es un problema de ellos. Muchas familias suelen tener estos mitos: 'los chicos saben lo que hacen', 'manejan la tecnología mejor que nosotros'. Por eso el primer paso es asumir que como adultos -docentes, familias, etc- somos parte y tenemos la responsabilidad de hablar de estos temas", expresa. Además, es importante no eliminar ningún contenido de la computadora o teléfono celular, que pueda utilizarse como evidencia en la denuncia, así como el ID del acosador, los chats, entre otros elementos.

"Aún falta mucho por hacer, estamos a tiempo y debemos hacerlo"

El camino recorrido muchas veces nos lleva a detenernos y a revisar nuestra propia historia. Roxana repasa cómo fue su proceso personal: desde toparse con un delito que no estaba tipificado en el país, hasta ser hoy una de las mujeres que lleva la bandera contra el Grooming.

"Roxana se encontró con un delito que le causó dolor, porque le tocó lo más sagrado que es su hija. Y encontrarse con tanta ignorancia la hizo sentir culpa. De entregar un dispositivo a un menor de edad sin conocer su sistema, ni riesgos, pensaba que estaba segura dentro de casa y en realidad la dejo conectada a un mundo donde no todo lo que parece ser, y es. Resiliencia dicen muchos, Roxana hoy te dice que fue el amor por mi hija, por ella todo y más. Fueron años de capacitación, de despertar no sólo a lo que tanto dolió, sino también como ciudadana. Los adultos somos responsables de la sociedad que le dejamos a los mas chicos y tenemos que hacernos cargo de eso. Y agradezco tener el pilar que es mi esposo y un equipo de gente de calidad humana increíble, que algunos sin ser padres dedican horas de su día a esta lucha. Aún falta mucho por hacer, estamos a tiempo y debemos hacerlo", expresa la presidenta de Mamá en línea, asumiendo que el momento es ahora. El presente que brinda una oportunidad ante un delito que no descansa.

"La Campaña Nacional es un sentimiento que no podemos describir junto a Rosa, y doy gracias porque cada vez que volvemos a casa podemos abrazar a nuestras hijas y decirles cuanto las amamos", cierra.

Si sufrís de Grooming o conocés a alguien que pueda estar siendo contactado y/o extorsionado por un adulto, comunicate con la línea 137, 134 o con el 0800 222 1717, o con alguna organización o centro cercano, que brindan asesoramiento y contención.

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