No es la primera vez que trasciende un caso como este pero Micaela Saítta espera que sea la última. Esta joven, que denuncia haber sido drogada en un boliche en Costanera, contó su historia a través de las redes sociales "para que no le pase a ninguna más".

A través de una publicación en Instagram, puntualizó que este episodio tuvo lugar el pasado sábado 27 de octubre en el local bailable Jet, apostado sobre Av. Costanera Rafael Obligado.

"Alguien puso SIN MI CONSENTIMIENTO drogas en mi bebida: un vaso de agua con hielo, de una botella cerrada que pedí porque estaban fumando adentro del boliche y me estaba haciendo mal el humo", explicó.

"Automáticamente me empecé a sentir muy mal. Un calor EXTREMO me recorría el cuerpo y tuve que salir a la terraza del boliche. Mis síntomas empeoraban, me sentía desorientada, el sonido y las imágenes se distorsionaban y se me dormían las manos y las piernas", relató.

Afortunadamente, Micaela llegó a enviarle un mensaje a través de WhatsApp a su amiga, Camila, que "en menos de un segundo" llegó hasta ella. Una vez dentro de la sala de Enfermería del local, un profesional la revisó y, según apunta la chica, la exhortó a que le cuente "qué drogas" había tomado y "con qué alcohol".

90 minutos tardó la ambulancia en arribar al sitio, mientras dos efectivos de seguridad intentaron mantenerla consciente colocándole bolsas de hielo en todo el cuerpo y proveyéndole oxígeno. En el Sanatorio de la Trinidad de Palermo confirmaron la sospecha: "Mis análisis dieron positivo para 3 reactivos: éxtasis, anfetaminas y metanfetaminas".

"Cuento esto porque pasa, porque no solo lo vemos en la tele y porque no solo pasa 'en la clase media baja'. Cuídense, no estén solas nunca"

"Tuve una reacción alérgica a uno de los componentes de lo que me dieron y la boca se me hinchó 5 veces mi tamaño. Los médicos planteaban el siguiente panorama a mi familia: muerte, riesgo de acv, falla renal, falla cardíaca, falla hepática, entre otras", añadió Micaela.

De la guardia del centro de salud, la joven fue derivada a terapia intensiva hasta el viernes, que fue dada de alta. "Hoy subo esta foto porque puedo, porque estoy viva y no pudieron conmigo. Cuento esto porque pasa, porque no solo lo vemos en la tele y porque no solo pasa 'en la clase media baja' como muchos dicen y te quieren hacer creer. Cuídense, no estén solas nunca", concluyó.