Más de un millón de chilenos salieron a las calles en el centro de Santiago para defender su postura. En una semana murieron 19 personas en los violentos disturbios con intervención militar, hubo saqueos e incendios en varias ciudades del país trasandino.
Después de la "marcha más grande de Chile", que fue la manifestación más grande en la historia del país, el presidente Sebastián Piñera escribió en Twitter: "La multitudinaria, alegre y pacífica marcha, donde los chilenos piden un Chile más justo y solidario, abre grandes caminos de futuro y esperanza".
"Todos hemos escuchado el mensaje. Todos hemos cambiado. Con unidad y ayuda de Dios, recorreremos el camino a ese Chile mejor para todos", cerró el mandatario.