Tiago denunció que un sacerdote de la Parroquia Tránsito de San José de Liniers, de nacionalidad chilena, abusó sexualmente de él delante de sus compañeros. Según relató el cura bajó a la medianoche de su habitación, totalmente alcoholizado, y se dirigió a la cocina donde estaban los chicos preparando alimentos para un evento solidario. 

"Primero comenzó a hacer chistes a los chicos del grupo, de los cuales eran tres chicas mayores, un chico mayor, seis chicos menores y yo. A las chicas les dijo en 'broma' que iban al Grupo Misionero para estar conmigo y verme porque soy un pibe lindo. Después toqueteaba a los chicos (el pelo, los hombros) y constantemente se acercaba a mí y me hablaba", relató sobre el episodio ocurrido el 13 de julio.

El acusado fue identificado como Nelson Pérez Jerez, quien fue separado de su cargo y se comprobó que cuenta con antecedentes de abuso y adulteración de certificados de defunción en un hogar de chicos discapacitados en Chile, donde fue director durante 20 años.

La víctima comentó sobre Jerez: "Tiene contacto conmigo desde cuarto año, que es cuando ingresé al grupo misionero del colegio San José de Liniers. Hasta ese momento sólo lo había visto dar misas y por los pasillos del colegio". 

"Luego de cierto punto comenzamos a pedirle a Nelson que se fuera a dormir, de todas las maneras posibles. Todos los chicos estaban incómodos con lo que pasaba", contó Tiago.

Sus papás hicieron la denuncia que quedó radicada en el juzgado N° 63 a cargo de la fiscalía N° 1. Pero en un principio "los directivos del colegio intentaron que el tema no pasara a mayores y trataron de que Nelson me pidiera perdón"

Ahora desde el colegio San José de Liniers, difundieron un comunicado donde detallaron que se decidió "separar al sacerdote de toda responsabilidad y tarea, hasta tanto el tema sea debidamente aclarado", pero los familiares de Tiago denuncian que "será apartado sólo por 90 días".