Semanas atrás, Netflix estrenó un documental sobre el paso de Diego Maradona por Dorados de Sinaloa, de México, en el que tuvo un buen papel como entrenador pero no pudo cumplir el objetivo de  ascender al equipo a la máxima categoría.

En un tramo film, la cámara captó al Diez acercándose a un alambrado en el que hay un grupo de chicos que el gritaba "Maradona, Diego, un autógrafo".

Molesto por la intensa insistencia de los niños, el campeón del mundo en 1986, reaccionó: "Escúchenme una cosa. Si siguen gritando, me voy a la mierda. ¿Ok? Yo estoy acá respetándolos a ustedes, ustedes respétenme a mí. La próxima vez, me voy. No tengo ningún problema".

Inmediatamente se produjo un silencio en la tribuna y el ahora técnico de Gimnasia y Esgrima La Plata continuó firmando. Instantes después, ante la pasión por tener un recuerdo de su ídolo, en un momento se escapó un grito, y uno de los ayudante de Maradona se llevó un dedo a su boca en un claro gesto de pedido de silencio.

El video no tardó en viralizarse en las redes sociales y generó repudio total por parte de los usuarios.