La vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores entre Boca y Atlético Mineiro se empezó a jugar ni bien terminaron los 90 iniciales en La Bombonera. Los errores del VAR y la disputa entre ambos clubes se sumó a las críticas de la dirigencia del club brasilero por los tratos de sus pares y ahora todo se muda a Brasil.
En una de las primeras imágenes polémicas, la delegación del conjunto argentino se quedó varado por más de dos horas en el aeropuerto de Belo Horizonte, donde se disputará la vuelta, y luego de la misma llegaron al hotel en donde los esperaba una noche clásica de hace décadas.
Con el objetivo de amedrentar a los jugadores y perjudicar su desempeño en la cancha, un grupo de hinchas se acercó en horas de la madrugada con pirotecnia y bombas de estruendo para afectar el sueño de Boca, en una jornada que se extendió por varios minutos hasta la llegada de la policía.
Además de esa causa, por la que se secuestraron distintos materiales sin utilizar, se dieron incidentes en el frente del hotel en donde se desarmaron las vallas y hubo enfrentamientos para evitar el ingreso de los mismos al edificio.
Por todos esos casos, se detuvieron a 18 hinchas por todos los hechos vividos en Belo Horizonte, en un partido que promete ser más caliente de lo normal, en un duelo en donde caerá un equipo que integra la corta lista de candidatos a levantar una nueva Libertadores.