Increíble. Insólito. Tragicómico. Por suerte, con final feliz. Y, según el mismo Pablo Lavallén, DT del heroico Atlético Tucumán que ganó en Ecuador después de un encuentro de locos, Dios es justo.

Esas fueron las palabras del técnico cuando finalizó el choque ante El Nacional. Estaba furioso por el sufrimiento que había tenido que pasar junto con los dirigentes, jugadores y cuerpo técnico del club argentino.

En una entrevista que dio para la televisión y, ya más tranquilo, Lavallén comentó cómo fue la bochornosa travesía que debieron realizar, sólo para jugar un partido de fútbol.

El DT afirmó que la mayoría de la gente que estaba en el avión no pudo viajar a ver el encuentro. Ilógicamente, el equipo debió viajar en un avión de línea y llegar al estadio en un micro a 130 kilómetros por hora.

Además, destacó la acción del embajador argentino en Ecuador, Luis Juez, y se mostró aliviado por el desenlace de la situación. 

Mirá el desahogo de Lavallén después de la victoria: