Este año llega a nuestro país la obra teatral “Network” basada en la película homónima estrenada en 1976 escrita por Paddy Chayefsky y protagonizada por Faye Dunaway y Robert Duvall, que supo coronarse con  cuatro estatuillas en los Oscar en 1977.

Ahora bajo la dirección de Corina Fiorillo, la producción de Ariel Diwan y la versión adaptada por Juan José Campanella, llega al Teatro Coliseo el próximo 14 de julio protagonizada por Florencia Peña, Coco Sily, Eduardo Blanco, Cesar Bordón y Pablo Rago.

La historia se centra en Howard Beale (Coco Silly), un presentador de noticias con más de 25 años de trayectoria en televisión, a quien le comunican que lo van a despedir y como respuesta anuncia que en su último día al aire se suicidará en vivo. Esta amenaza hará que la audiencia suba y será el disparador para mostrarnos el poder de los medios de comunicación, y el juego descarnado que confundirá  la realidad y la ficción.

“Mi personaje es un tipo que hace 30 años conduce un noticiero y de repente anuncia que se va a suicidar en vivo. Y a partir de ahí empieza una locura, en toda la maquinaria televisiva, pero en particular en su vida porque él empieza a tener delirios místicos, empieza a escuchar voces y empieza a volverse loco pero en cámara. Y no lo pueden sacar del aire porque mide un montón”, comenta Coco Silly al tiempo que se muestra feliz con la convocatoria para ponerse en este rol que lo saca de su zona de confort.

“Es un desafío enorme. Primero que me hayan convocado para este papel, para este espectáculo, con este nivel de producción que es una locura. Y después que me hayan convocado para un personaje que no está dentro de los paramentos de lo que yo vengo haciendo. Porque tenía que asumir un riesgo importante y como se dice y está tan de moda `salir de la zona de confort` y meterme en esta locura. Así que estoy más que feliz”, aseguró sobre la obra.

Esta sátira mordaz y electrizante sobre el cinismo de los medios se verá representada por los diferentes personajes que defenderán su moral, o falta de ella, frente a la audiencia que indefectiblemente será testigo.

“Siempre me pareció interesante hacer personajes que están tan alejados de mí, como lo está en este caso Diana”, dice Florencia Peña que agrega: “Porque tengo que encontrar que hay de mí, para meterme en la piel de esta mujer, aunque sea con una lupa y tratar de encontrar su lógica y entender su cabeza. Bueno en general los personajes cuando no son empáticos, como en este caso, que es un personaje frío y complejo, siempre hay que encontrarle el por qué, por qué es así, ¿dónde le duele la vida que la hace ser así?”, se pregunta.

Y suma: “Por eso trato de que Diana tenga varias capas, más que simplificar que mi personaje es mala. No, no es mala qué le pasa en la vida que ella se defiende de esa manera. Y porque trata a la gente así”, explica para resumir la inmoralidad de su personaje.

NETWORK PROPONDRÁ OTRA FORMA DE VIVIR EL TEATRO

Pero "Network", además de una obra de teatro será una superproducción con un despliegue técnico y tecnológico sin precedentes en Argentina que mantendrá al espectador inmerso en un set de televisión, como uno de los escenarios principales, en el que luces, cámaras y pantallas se operan sobre el escenario en tiempo real.

Esto le propondrá al espectador sumergirse en una experiencia única  donde además estarán en el escenario  los clásicos teleprompters transmitidos en simultáneo en tres monitores. Y como dato no menor, el equipo técnico y los actores, estarán al mismo tiempo en el escenario, mientras que el público podrá ver material filmado y en vivo a la vez.

“Yo ya sabía de la película, e incluso en el 2020 habíamos hablado con Marcelo Cosentino que nos volvíamos locos con la idea de hacerla. Por supuesto no estábamos a la altura de poder hacerlo de ninguna manera. Y la verdad es que la película me encantó y cuando me ofrecieron el personaje de Jensen, que es el capo de la compañía, el presidente,  me puse a pensar en qué personaje hubiera elegido yo del paño de este cartel y  dije justamente este. Y ahora me toca hacerlo y estoy feliz”, introduce Pablo Rago sobre su rol.

Y desarrolla: “Es el más práctico, el más pragmático de todos. Es el tipo que este sobre todos  y cuando empieza a ver una lucha de poderes dentro del canal con la dirección de noticias, con la directora de programación, el está sobrevolando eso. Es como una especie de visionario del futuro. Pensá que esta película se estrenó en el 76` y  ya habla de plataformas, de que lo que importa son las ideas. Es futurista, parece escrita ahora”, comenta en consonancia con sus compañeros.

Por su lado Cesar Bordón, está del lado de los villanos si tuviéramos que trazar una línea imaginaria y pintar con un solo color a las personas, pero el actor que viene de protagonizar un éxito en la serie de Luis Miguel adelanta sobre este trabajo: “Fran es un CEO de una empresa de un multimedio que compra un canal, entonces aplica ahí sus reglas de mercado. Es bastante amoral si se quiere y lo único que le importa es el éxito o el fracaso que es lo que mide su emocionalidad”.

Al tiempo que detalla cómo construyó el carácter de su personaje: “En principio aunque hable mal de mí, yo digo que los personajes no se alejan tanto de uno, y a medida que pasan los años cada vez se acercan más porque uno ve cuales son los puntos en común”, advierte al mismo tiempo que agrega: “Soy muy observador y me parece que hay mucha muestra de empresario y de gente que hace todo por un punto de rating, por el dinero y demás. Mi personaje es por excelencia el que muestra el poder y la aspiracionalidad dentro de la obra”, sostiene.

Por último en el paño de roles protagónicos está Eduardo Blanco quién se pone en la piel de Max Schumacher: “Es el director de noticias de este canal de televisión, que ahora es una cadena, porque nos ha comprado un grupo inversor y bueno estará ahí en medio de un tira y afloje  de poder y además está toda su historia personal”, describe y completa:  “Es el que más cercano puede estar a lo que podemos denominar del sentido común, que no siempre es el mejor de los sentidos, pero es la persona más normal en esta jungla”, manifiesta.

LA REFLEXIÓN QUE INVITA A HACERNOS LA OBRA

La pieza teatral hace un punto que invita a reflexionar sobre cómo el poder en una sociedad existista y superficial, de la mano de la manipulación mediática, pueden sacar lo peor de una persona. Y llevarlo a límites de dudosa moral y al filo de la locura. Asentados en esta premisa hablamos con sus protagonistas que dejaron sus deducciones acerca si el medio, puede volver loco a un individuo.

Coco Silly: “Sí, es un medio donde tenés que tener mucho carácter para trabajar en esto. Los niveles de exposición, los momentos de tanto éxito, los momentos de fracaso. La verdad es que esta profesión tiene unos desniveles emocionales que si no sos sólido, si no tenés una familia, si no estás bien, si no haces terapia, te podes volver loco sin lugar a dudas. No sé si al nivel de suicidarte en cámara. Pero volverte loco, es probable”, analiza haciendo un paralelismo con su personaje.

Pablo Rago coincide con la mirada de su colega y agrega: “Sí por supuesto que sí le podría pasar a alguien, e incluso lo hemos visto en muchos casos de gente que piensa que esto es la vida real. Hay un monólogo muy bueno que hace Coco que le habla a la gente y les dice que siguen mirando la tele como si fuera la vida real y se olvidan de vivir la realidad. Y mucha gente que se pasó del otro lado de la cámara se creyó que las luces eran reales y a más de uno le explotó la cabeza”, asevera.

Reflexión a la que se suma Cesar Bordón que agrega: “Los medios han vuelto locos a muchas personas, no lo estamos inventando nosotros. Yo creo  que los actores si bien hay muchos casos diferentes, los actores o los conductores o muchas veces los periodistas cuando tenemos una formación está un poco más entendida la cuestión. Pero en general hay muchos programas, no quisiera mencionar ninguno, pero gente que llega de afuera  de la televisión o gente muy joven que ingresan a la televisión, y sobre todo en ese medio, hay una exposición tan descarnada que no sabes para donde te va a disparar la cabeza”, comenta.

Y deja un ejemplo más contemporáneo que involucra a la destellante fama repentina que brindan las redes sociales: “creo que la televisión vuelve loca a mucha gente. Pero es un planteo interesante para el ser humano el buscar qué quiere para su vida, si quiere conseguir seguidores, como pasa hoy con las redes que muchos trabajos se basan a partir de cuantos seguidores tenés", remarca.

" Y es una lucha que tenemos con los productores esto de: `Bueno tiene 14 millones de seguidores hace una obra de teatro y no lo vienen a ver` y eso es peligroso, porque donde está el talento ahí, cómo se sostiene y a qué costo esos seguidores. Creo que sirve para la difusión, pero eso no significa que la gente pague una entrada para venir a ver a esa celebridad que es conocido por el solo hecho de ser conocido”, explica.

Eduardo Blanco añade a eso el furor por los realities y dice: “Otro caso son los realities que vos ves a los personajes, que bueno ya a lo mejor entran con alguna patología, pero gente que de repente no es famosa, y de la noche a la mañana la conoce todo el mundo, y después de la noche a la mañana la deja de conocer. Y bueno eso te puede enloquecer. Pero no acá en la argentina, en todo el mundo y la verdad es que lo medios de comunicación construyen cultura", señala. 

Y puntualiza: "Nosotros, producto de lo audiovisual, hemos comprado jeans, carteras, vivimos como nos dicen que tenemos que vivir eso de la familia “tipo”. Nos construyen una cultura casi sin darnos cuenta. Y el tema de la fama, que se da en los medios de comunicación, si no tenés una buena base puede volverte loco. Yo no compro la idea que muchas veces he escuchado de `vos tenés una vida pública`. No, yo tengo una profesión pública, mi vida es privada. Entonces yo ese límite no lo cruzo, pero si de repente no te das cuenta y ese límite lo cruzaste alguna vez, es muy difícil de volver”, sentencia.

Para cerrar Florencia Peña se permite una filosofar un poco más y habla de la responsabilidad de los medios: “Yo creo que los medios de comunicación entienden y saben de la responsabilidad que es dar noticias y que en algún punto eso se vuelve algo peligroso y lo hacen igual. Y lamento eso, porque yo soy anti eso, me parece que uno tiene que ser honesto y dar lo que tiene para dar, más allá del punto de rating. La verdad es que el mundo no se rige así. Pero hay que entender que las noticias, hoy la dan empresas y esas empresas tienen necesidades de ganancias”, desarrolla  primeramente.

Y continúa:” En la obra yo propongo algo que es cualquier cosa, no quiero spoilear, pero es de un nivel demencial y el personaje de Eduardo me dice: `No yo eso no lo voy a hacer, eso es inmoral `y yo le digo `es que nuestro negocio no es moral, el negocio es el negocio`.Y para mí eso resume un poco lo que va contar la obra porque es de arranque ese texto. Y creo que hay quienes esa frase se lo toman literal y lo llevan a cabo y hay quienes, como yo que pertenezco a este medio hace 40 años lo proceso de otra forma”.

NETWORK SE ESTRENA ESTE 14 DE JULIO EN EL TEATRO COLISEO Y YA PODES ADQUIRIR TU ENTRADA HACIENDO CLICK ACÁ.