Con la llegada de las temperaturas más altas, el uso de menos ropa y el incremento de las actividades al aire libre, la piel queda expuesta a factores externos como el sol, cloro de la pileta, altas temperaturas y viento, por eso, es tan importante modificar la rutina de cuidado de la piel en esta época.
Natalia Achitte, Técnica en Dermatocosmiatría y Esteticista Corporal, Capacitadora Profesional Lidherma, asegura que la rutina es la misma para el cuerpo y el rostro, solo es necesario elegir los productos adecuados para cada uno; y brinda consejos para tener una rutina completa:
- La limpieza se vuelve fundamental. Con el aumento de las temperaturas, la sudoración incrementa y puede volver a la piel más oleosa, para este paso elegí jabones y geles, ya que son texturas más agradables para este momento.
- Momento de cambiar la hidratación. Este paso sigue siendo fundamental para reponer y retener la humedad que la piel necesita. En este cambio de estación optá por productos con vehículos más livianos como serum, loción, gel, crema-gel o emulsión.
- Se termina el invierno y se termina la temporada de ácidos. Es muy importante suspender los renovadores celulares, ya que al tener mayor contacto con el sol puede provocar manchas y lesiones, por lo que es recomendable reemplazarlos por el uso de exfoliantes con partículas que aumentan la permeabilidad.
- Redoblá la apuesta en protección solar: en este momento es necesario colocar protector solar cada 2 horas, tanto en cuerpo como cara, utilizar anteojos para proteger los párpados, sumar un sombrero de ala ancha para evitar el sol directo sobre la cabeza, el rostro y las orejas y fundamental no exponerse entre las 11 y 16 horas.
- Llevar siempre la bruma que más te guste o que te recomiende el profesional que cuida tu piel para evitar la deshidratación y mantener tu piel confortable.
Para conocer qué productos de Lidherma podés sumar a tu rutina, hacé clic acá. Recordá siempre consultar con un profesional de la salud.
No podemos terminar sin dedicarle un extra a esas zonas que en invierno están cubiertas por la ropa y los zapatos y, por el roce, se vuelven más gruesas, ásperas y secas, hablamos de los codos, rodillas y talones:
- Para higienizar estas zonas es importante utilizar productos que tengan efecto limpiador y exfoliante, para que renueve y repare la piel
- La exfoliación se vuelve fundamental para lograr una higiene más profunda y eliminar células muertas.
- Para la reparación de la piel, aprovechá los beneficios de los activos concentrados.
- Para la humectación es ideal optar por mascarillas con productos que no necesitan ser retirados, y repetir entre dos y tres veces por semana.