¿Te decidiste a ponerte en forma pero te da fiaca salir de casa o no querés gastar plata en el gimnasio? En esos casos, hacer ejercicio en casa es una gran opción... Aunque cuenta con una gran contra: al ser uno mismo quien maneja los horarios, es muy difícil mantener la constancia. 

Básicamente, el peligro de hacer deporte en casa es que es fácil dejarlo “para otro día”. Por eso, es fundamental fijar un horario del día en el que sepas que vas a tener tiempo para vos y marcar un objetivo de (al menos) 30 minutos por día.

La clave es no tener que estar corriendo muebles o quitando cosas del camino cuando querés hacer ejercicio. Si esto pasa, va a ser muy difícil que te den ganas de activar. Por eso, lo mejor es elegir un lugar de la casa donde no necesites mucho tiempo para tenerlo listo.

Aunque obviamente podés ser vos misma la que marque el ritmo o las actividades (cinta, bici fija, sesiones de abdominales, etcétera), una buena opción es descargar aplicaciones de ejercicios (¡hay miles!) o elegir algunos canales de Youtube.

Podés elegir lo que quieras y hay para todos los gustos: desde aerobics, a Zumba, yoga o programas para cada parte del cuerpo. Sólo es cuestión de elegir el que más te guste… ¡Y empezar!