Pasaron cuatro meses desde que Florencia Morales apareció sin vida ahorcada en una comisaría de Santa Rosa de Conlara, en la provincia de San Luis. Tras las reiteradas denuncias y una reciente manifestación, se reactivó la causa.

Así lo indió el diario Página 12, a raíz del testimonio del abogado Santiago Calderón Salomón quien había denunicado la parálisis de la investigación.

Florencia Morales tenía 39 años. Era madre y abuela y ejercía como empleada en un hotel. Fue vista por última vez el 5 de abril, luego de que la Policía la detuviera presuntamente por no cumplir con la cuarentena ya que la terminación del número de su DNI no correspondía con el día impar avalado para su salida.

Horas después su cuerpo apareció ahorcado con el cordón de una prenda y sin vida en la comisaría, luego de haber pedido auxilio. Su caso se suma a atroces acontecimientos como los de Luis Espinoza en Tucumán. Aún continúa desaparecido Facundo Astudillo Castro (Bahía Blanca) y en los últimos días cobró aún más visibilidad la búsqueda de Franco Martínez en Lomas de Zamora.

"Mi hermana no se suicidó, la mató la policía", denuncia su hermana, Andrea Morales; grito de denuncia para que la causa no se archive entre múltiples otras. 

El martes próximo tendría lugar una nueva autopsia solicitada por el abogado Calderón Salomón que no se realizó anteriormente porque el magistrado consideró que los costos debían correr a cuenta de la familia de la víctima. Finalmente, la Secretaría de la Mujer provincial se comprometió a encargarse de los gastos.

Por su parte la ONU (Organización de las Naciones Unidas) reportó el caso de Morales eentre los femicidios ocurridos en el país. Recordemos que en lo que va de este 2020 se reportaron 178 muertes de femeneidades en manos de varones violentos, de acuerdo al reciente informe del Observatorio de las violencias de género “Ahora que sí nos ven".