Una de las primeras sectas en tener gran repercusión mundial fue la conocida como Jonestown. Ese era el nombre informal del “Proyecto agrícola del Templo del Pueblo”, una comunidad liderada por Jim Jones en el país caribeño de Guyana. En 1978, esa secta dio lugar al suicidio colectivo más grande de la historia. 

En 2022 se estrenó un documental que se llama “Keep Sweet” (Sé dócil), que cuenta las atrocidades de Warren Jeffs, líder de la Iglesia Fundamentalista de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días y culpable de crímenes aberrantes entre sus seguidores

Muchas veces, el encierro y los vejámenes a los que son sometidas las víctimas son posibles porque ciertas sectas tienen vínculos con el poder de cada lugar. Es lo que pasó con la llamada “Colonia Dignidad” en Chile durante varias décadas.

Hay religiones que, a la vista de quienes no participan de ellas, tienen toda la pinta de ser sectas. Quizás la más famosa sea la llamada “Cienciología”, de la que son parte muchos personajes famosos, como es el caso del actor Tom Cruise. 

En 1974, el periodista francés Claude Vorilhon, también conocido como Rael, fundó la secta conocida como “Movimiento Raeliano”. A diferencia de otras sectas, los Raelianos tenían una característica muy particular: la creencia en la vida extraterrestre.

Las sectas a veces alcanzan características que, si no fueran trágicas, hasta serían risueñas. Como en el caso de Mark Hofmann, un falsificador entre mormones en Utah, Estados Unidos.
En España, durante catorce años funcionó la secta llamada “Edelweiss”, fundada por Eduardo González Arenas. Como resultado de su actuación, fue condenado por abusos y corrupción de menores.

En los últimos años, muchos casos de supuestos líderes carismáticos fueron retratados por series y películas. También fueron motivo de obras audiovisuales los asesinos que organizaban sus delitos en comunidad. Así, personajes como Osho o Charles Manson se volvieron protagonistas de ficciones y de documentales. 

Muchas veces, una secta no solo involucra delitos a la libertad o la pérdida de derechos, sino que suele tratarse de organizaciones con conexiones políticas y con grandes ingresos de dinero.

Sectas suicidas, sectas que abusan sexualmente de menores, sectas con objetivos seudo religiosos, sectas que solo buscan ganar mucha plata. Todas tienen su nivel de peligro. Todas están ahí, expectantes, buscando captar nuevas víctimas.