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La Justicia le dio el aval constitucional al protocolo de armas de Bullrich

La denuncia había sido presentada por un organismo de derechos humanos y el juez la rechazó por considerarla "parcial, arbitraria e inexacta"

La Justicia le dio el aval constitucional al protocolo de armas de Bullrich

El juez Héctor Pedro Plou rechazó un pedido presentado por la asociación de Derechos Humanos llamada "Linqueños por los Derechos Humanos" por considerarla "parcial, arbitraria e inexacta" y avaló así el protocolo de armas del ministerio de Seguridad. 

Plou aseguró además en el fallo que la denuncia presentada para anular el protocolo "ignora aquellas disposiciones que contradicen su posición, aunque formen parte necesaria del articulado que cuestiona", adelantó el portal Infobae

La disposición del ministerio de Seguridad salió el 3 de diciembre y fue criticada por todos los organismos de DDHH, aunque Patricia Bullrich lo respaldó cada vez que pudo. 

El protocolo flexibiliza las oportunidades en las que un policía podrá utilizar el arma de fuego y deja algunos espacios confusos que se teme se llenen con casos de gatilo fácil. 

   EN QUÉ SITUACIONES LAS FUERZAS PODRÁN USAR SUS ARMAS:

  • Cuando se actúe bajo amenaza de muerte o de lesiones graves para sí, o para terceras personas.
  • Cuando el presunto delincuente posea un arma letal, aunque luego de los hechos se comprobase que se trataba de un símil de un arma letal.
  • Cuando se presuma verosímilmente que el sospechoso pueda poseer un arma letal
  • Cuando estando armado, busque ventaja parapetándose, ocultándose, o mejorando su posición de ataque.
  • Cuando tenga la capacidad cierta o altamente probable de producir, aún sin el uso de armas, la muerte o lesiones graves a cualquier persona.
  • Cuando se fugue luego de haber causado, o de haber intentado causar, muertes o lesiones graves.
  • Cuando la imprevisibilidad del ataque esgrimido, o el número de los agresores, o las armas que éstos utilizaren, impidan materialmente el debido cumplimiento del deber, o la capacidad para ejercer la defensa propia o de terceras personas.