Está claro que no es nada fácil elegir cuál es el gol más lindo de la carrera de Lionel Messi entre los casi 700 que ya convirtió. Sin embargo, por el contexto en el que se dio y porque realmente fue una obra maestra, el tanto con el que selló el triunfo ante el Real Madrid en la ida de las semifinales de la Champions League 2011 tiene un lugar en el podio.

Justamente, se cumplen nueve años de aquel 27 de abril de 2011 en el que el equipo catalán se impuso por 2 a 0 como visitante frente al Merengue, en las semifinales de una Champions League que terminó conquistando.

Sergio Busquets lo esperó con la pelota en la mitad de la cancha y la Pulga, que había abierto el marcador, apiló y dejó en el camino a una, dos... cinco camisetas blancas y definió de derecha. Una verdadera maravilla en el único cruce directo que el rosarino tuvo con el Real Madrid en competencias internacionales

Siete días antes de ese partido, Real Madrid le había ganado la final de la Copa del Rey al Barcelona por 1 a 0. Por eso, Messi se dio el gusto de sanar la herida: tras la victoria en el Santiago Bernabéu, la historia se definió una semana más tarde en el Camp Nou con un empate 1-1. En la definición, el conjunto blaugrana venció al Manchester United (3-1) en Wembley y se quedó con su cuarto título, el tercero con Messi en el plantel.