Amalia Granata, contó en un móvil que dio hoy para el programa de LAM, la decisión que tomó junto a su pareja de ligarse las trompas para no tener más embarazos.

“En febrero me operé, me ligué las trompas de Falopio”, afirmó Granata, que es madre de Uma (que acaba de cumplir 13 años), fruto de su matrimonio con el "Ogro" Fabbiani, y de Roque (4), junto a su actual esposo, Leo Squarzon.

El proceso la llevó a reemplantearse muchas cosas, ya que en su deseo quería ser madre de al menos dos niños más. Sin embargo la experiencia de su último embarazo y la llegada de su cumpleaños número 40 fueron determinantes para someterse a la operación.

“Es una decisión que me costó porque queríamos seguir agrandando la familia. Después de Roque buscamos por casi tres años lo que sería un tercer bebé para mí y el segundo de Leo, pero no llegó”.

Y agregó: "La verdad es que con 40 años y tanto trabajo tenía miedo de relajarme y pasada cierta edad para la mujer es un poco más difícil llevar un embarazo. Ya el embarazo de Roque había sido difícil", continuó en "Los Ángeles de la mañana".

Y dio más detalle de cómo fue: "Los seis meses estuve internada con una infección en los riñones, él nació un mes antes porque estaba enredado en el cordón umbilical y me tuvieron que hacer una cesárea de urgencia".

Con este historial, la Diputada eligió la operación para no exponerse a otro embarazo de riesgo: "La verdad es que me hubiera encantado tener uno o dos niños más. Pero Dios así no lo quiso, por algo será".

Además remarcó que: "Preferí hablarlo con mi pareja también, comunicarle esta decisión y hacerlo. Él no quería que me ligue las trompas. Hasta último momento, hasta la noche anterior quería intentar para ver si quedaba embarazada", comentó.

 Y para cerrar expresó: "Pero yo no podía arriesgarme a poner en riesgo a esta edad a un bebé y todo lo que implica. Yo estoy trabajando mucho, casi nunca estoy en mi casa. Ya está. Me parecía lo más sano quedarnos tranquilos con esta decisión que fue muy difícil", concluyó.