Tras meses de especulación Sony finalmente confirmó el nombre de su próxima consola, sorprendiendo a todos los que vivieron dentro de una lata en el fondo del mar durante los últimos veinte años al designar a la nueva PlayStation como PlayStation 5. Equipo que gana no se toca dicen, pero por fortuna parece que toda la imaginación que no tiene el nombre se puso al servicio de lo que importa: el hardware.

PlayStation 5 como su contraparte directa, la próxima Xbox, intentará pegar el salto definitivo a la nueva generación después de dos modelos de transición como fueron la PlayStation 4 Pro y la Xbox One X, y para hacerlo llegará al mercado a finales de 2020 con ciertas funciones y cambios que hubiera sido imposible implementar en esos nuevos modelos porque hubieran generado una fragmentación de mercado.

Donde Sony se diferencia de Microsoft es en su estrategia de comunicación: mientras que la casa de Xbox conserva el modelo tradicional de conferencia, anticipo y revelación, Sony se ha inclinado por lanzar la información de su consola a través de intermediarios (en este caso el prestigioso portal Wired). 

En abril de este año el arquitecto de PlayStation 4, Mark Cerny, ofreció una entrevista en la que anticipó algunas de las características del nuevo sistema, y después de meses de silencio, hoy Wired nos sorprendió con un nuevo encuentro con Cerny, esta vez acompañado del CEO de Sony Entertainment Interactive, Jim Ryan, para expandir los conceptos pasados y dar un vistazo a algunas novedades.

Para ordenar un poco la información vamos a separar la nota en los componentes, sus características y beneficios, y las inevitables respuestas que nos quedan por responder. También es importante considerar que si bien vamos a hablar exclusivamente de PlayStation 5, muchas de las características de la consola de Sony (como sucede en esta generación) serán compartidas con la competencia, dado que ambas empresas utilizan tecnología de AMD para su procesador y chip gráfico.

 

LA ESTRELLA: EL DISCO DE ESTADO SÓLIDO

Uno de los grandes argumentos de venta de esta generación de consolas será el adiós a los tiempos de carga. La PlayStation 4 será recordada como la última consola que haya incluido un disco rígido, que ató a los desarrolladores a viejas prácticas para intentar hacer la carga de los juegos y sus mundos lo más rápida e imperceptible posible.

El disco de estado sólido garantiza tiempos de carga súper veloces, y para demostrarlo la empresa utilizó en abril una demo de Spider-Man, el juego de mundo abierto de Insomniac Games de 2018, corriendo en una PlayStation 4 Pro y en un kit de desarrollo de la nueva consola. Mientras que en la actual PlayStation el viaje rápido (que permite trasladarse de un punto del mapa a otro automáticamente) toma poco más de ocho segundos de carga, en la PlayStation 5 ese tiempo es de menos de un segundo (0,8 segundos para ser exactos).

El video al que accedió Wired se filtró un mes después, cuando se proyectó en una presentación de Sony con accionistas. En el mismo también se puede ver que el nuevo disco rígido permite una carga más inmediata de los elementos que componen el mundo del juego, evitando que los desarrolladores tengan que limitar la velocidad a la que el jugador se mueve por él.

Pero como especificó Mark Cerny en la entrevista publicada hoy, los beneficios del nuevo disco no solo son para el jugador sino también para los desarrolladores, que ya no tendrán que perder tiempo y recursos en trucos para esconder los tiempos de carga (¿alguien se acuerda de los infames ascensores de Mass Effect?), y no tendrán que repetir elementos en diferentes sectores para que el disco los ubique más fácilmente, permitiendo reducir el tamaño de los juegos y los parches.

Además, la próxima consola dejará de tratar a los juegos como “grandes bloques de datos,” según palabras del ingeniero, y permitirá manipular el contenido con mayor libertad. Estos significa que será posible, por ejemplo, instalar sólo la campaña para un jugador o sólo el multijugador, si es a lo que se le quiere dar prioridad, o desinstalar la campaña cuando se haya terminado para liberar espacio en el disco sin tener que resignar el modo multijugador.

LAS DUDAS: Todos suena muy bien, pero también es importante considerar que Sony promete un disco en estado sólido con tecnología propietaria que no será como los que se consiguen en las tiendas. Y si los discos en estado sólido ya son caros, no queremos imaginar cuánto costará esta maravilla hecha a medida de las necesidades de la empresa, o cuánto limitará ese costo la capacidad de almacenamiento de la consola. ¿Será suficiente 1 Terabyte cuando los juegos ya superan los 100GB de peso y la PlayStation 5 ejecutará todo en 4K?

 

EL CORAZÓN: EL CHIP DE AMD CON RAY-TRACING

Tanto Sony como Microsoft volvieron a asociarse con AMD para que se encargue de las entrañas de sus nuevas consolas. Eso significa que como sucedió con PlayStation 4 y Xbox One, las próximas PlayStation y Xbox llegarán al mercado con características muy similares: ambas utilizarán un procesador (CPU) basado en la tercera generación de la tecnología Ryzen de ocho núcleos Zen2, y un procesador gráfico (GPU) que será una variante de la familia Navi de las placas Radeon que salieron en julio de este año.

Más allá de los detalles técnicos, que son complicados y muy aburridos, lo importante es destacar que ambas consolas deberían poder ejecutar juegos en 4K real (o sea a 2160p y no a 1400p escalado como de muchos juegos de PlayStation 4 Pro y Xbox One X) a 60 cuadros por segundo. 

Pero la verdadera novedad es que PlayStation 5 será compatible con la nueva tecnología ray-tracing, que realiza una simulación más realista de la incidencia de los rayos de luz, ofreciendo una ambientación hasta ahora inédita en los videojuegos. Hoy nos enteramos que, a diferencia de lo que se especulaba, la simulación se generará desde el hardware y no a través de software, garantizando efectos de la más alta calidad.

Otro punto interesante es que la tecnología también se puede utilizar para el audio, generando una simulación de la proyección del sonido y permitiendo una inmersión absoluta gracias a un chip que emula el sonido 3D incluso en parlantes regulares. Mark Cerny define la sensación que genera esta tecnología como “presencia” y asegura que es el próximo paso para el audio en juegos.

LAS DUDAS: Los fabricantes nos han roto el corazón en el pasado. PlayStation 3 debía ser el paso a la alta definición y la gran mayoría de los juegos corrían en 720p; y PlayStation 4 prometía experiencias a 60 cuadros por segundo y son contados los casos que lo hacen. Ray-tracing es una tecnología muy nueva y que consume muchos recursos en PCs muy poderosas, ¿qué podrán hacer estas consolas cerradas con tecnología desarrollada en 2018 cuando lleguen al mercado en 2020? 

 

EL CONTROL: EL DUALSHOCK SE RENUEVA

El joystick de PlayStation 5 no tiene nombre aún pero todo apunta a que continuará con el legado y se llamará DualShock 5, por lo que vamos a bautizarlo de esa manera para facilitar las cosas. El DualShock 4 fue uno de los puntos fuerte de la última PlayStation, por lo que no parece haber mucho para mejorar para la nueva versión. Por eso, Sony se enfocó en construir sobre lo establecido y ofrecer nuevas funciones que expandan las posibilidades de los desarrolladores y mejoren la inmersión.

El DualShock 5 incluirá dos grandes novedades: los gatillos resistentes (“adaptive triggers”), y la respuesta háptica (“haptic feedback”). El primero es un sistema que aumenta la resistencia de los botones L2 y R2 mientras más se los presiona, un efecto que ayudará a transmitir la sensación de estar tensando un arco o pisando el acelerador de un auto, pero se puede usar para una variedad de situaciones, como diferenciar los gatillos de las diferentes armas en un juego de acción. El segundo es un sistema de motores que modifican la rigidez de las palancas del joystick que, combinado con la vibración, aumentan la inmersión.

El haptic feedback es un viejo conocido para los amantes de la conducción virtual, porque se encuentra presente en todos los volantes de alta gama. La idea es que si estamos jugando un juego de autos podamos experimentar los diferentes terrenos en los dedos, pero también aplica a otros géneros: en la demo que mostró Sony un personaje debía recorrer diferentes escenarios (arena, hielo y agua) en un juego de plataformas, y cada uno de ellos ofrecía una resistencia diferente en los controles.

El nuevo joystick también reemplaza el parlante presente en el DualShock 4 por uno de mejor calidad y, aunque el reportero no lo confirmó, también debería incluir el panel táctil, para garantizar la retrocompatibilidad prometida. Lo que sí notó el enviado de Wired fue un orificio que parecía ser para un micrófono, un agregado que tiene sentido si consideramos que recientemente Sony solicitó la patente para una inteligencia artificial que hará las veces de asistente para el jugador y se controlaría con comandos de voz.

Toda esa tecnología y mecánica dentro necesita poder, por lo que Sony promete que el joystick tendrá una batería más grande que la actual y se conectará por USB-C, para garantizar una carga rápida.

LAS DUDAS: Aunque la empresa asegura que han conseguido un buen balance, el DualShock 5 suena pesado y muy lleno de cosas, muchas de las cuales, según nuestra experiencia con otros controles, terminan siendo funciones que nunca explotan su potencial o directamente no se usan. Sin ir más lejos podemos contar con los dedos de una mano los juegos que le sacan provecho al panel táctil del actual DualShock 4.

 

EL FORMATO: ¿ADIÓS AL BLURAY?

Si bien muchos de nosotros le dijimos adiós al formato físico hace año, las ventas de discos continúan siendo una parte fundamental de la industria, por lo que podemos esperar soporte físico por lo menos por una generación más. Sin embargo, es posible que el Bluray haya llegado al final de sus días, si lo que sugiere el enviado de Wired en una frase resulta como lo imaginamos. Hablando del formato, Peter Rubin dijo que “los juegos físicos para PS5 usarán discos ópticos de 100GB, que se insertarán en un lector óptico que también funcionará como reproductor Bluray 4K.”

Si los juegos de PlayStation 5 utilizaran Bluray no habría necesidad de hacer la distinción con el reproductor. Es posible que con la nueva consola de Sony debute un nuevo formato de disco (de nombre clave Archive Disc) en el que la empresa está trabajando junto a Panasonic desde hace año, que tienen capacidad de hasta 300GB. Tiene sentido considerando que juegos como Red Dead Redemption 2 y The Last of Us Part II ya vienen en dos Bluray, y si la resolución por defecto será 4K los estudios necesitarán mucho más espacio.

LAS DUDAS: Si Sony está buscando un nuevo formato porque se queda sin espacio en los discos, ¿qué hará Microsoft? ¿Volverá a caer en un formato de la competencia o se mantendrá firme con los Blurays y los reviviremos los viejos tiempos de juegos en varios discos?

 

LO QUE VES: LA INTERFAZ DE USUARIO

Mark Cerny dejó en claro que los cambios de la consola no solo serán a nivel sistema sino también superficiales. La interfaz de PlayStation 4 es cómoda pero más de cinco años después de su lanzamiento se siente vieja, y la empresa está lista para meter cambios. 

Dice Cerny que aunque gracias al disco de estado sólido entrar a un juego para ver qué novedades tiene para ofrecer será sencillo, la próxima consola ofrecerá información relevante directamente desde la interfaz. 

“Los servidores de los juegos multijugador proveerán en tiempo real a la consola con una serie de actividades a las que el jugador se puede sumar,” explicó. “Los juegos para un jugador ofrecerán información acerca de las misiones que hay para hacer y qué recompensas ofrecen al completarlas — y todo eso será visible en la interfaz de usuarios. El jugador solo tiene que entrar en lo que desee.”

LAS DUDAS: Si bien es una buena idea que los jugadores puedan recibir actualizaciones de eventos o misiones disponibles directamente desde la pantalla de inicio de la consola, habrá que ver en manos de quién queda ese trabajo y si su presencia no termina molestando más de lo que ayuda. Sony siempre fue una empresa más de hardware que de software y sus sistemas operativos e interfaces suelen ser poco prácticas.